Banco Central y reforma tributaria
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El presidente del Banco Central ha señalado esta semana que si bien hay cierto consenso en cuanto a que el país requiere de un mayor gasto en educación que genere retornos a futuro, esto es que pueda lograr un efecto positivo en la calidad del capital humano que a su vez redunde en un efecto positivo sobre la productividad, un proyecto de reforma tributaria de la magnitud de la que el gobierno de la presidenta Michelle Bachelet ha enviado al Congreso puede tener efectos macroeconómicos sobre variables clave como el ahorro y la inversión en el país.
Si bien Rodrigo Vergara ha sido cauto en expresar que es difícil hacer una estimación o proyección sobre cuáles serán dichos efectos, lo cierto es que las palabras del jefe del instituto emisor ocurren en medio de los temores y advertencias que la profunda iniciativa tributaria ha generado en un amplio rango del mundo empresarial, donde día a día se suman las voces de sectores productivos que acusan diversos alcances y efectos de la propuestas en manos del Legislativo, algunas de las cuales han sido modificadas por las autoridades -por la vía de indicaciones-, principalmente acogiendo los llamados de parlamentarios de la propia coalición gobernante.
De todos modos, el presidente del Banco Central ha anunciado que si se detecta efectos macroeconómicos de la reforma tributaria -que avanza con celeridad en su tramitación en el Congreso- se dará a conocer oportunamente. Esto, en el marco de una economía en fase de desaceleración mayoritariamente atribuida a un freno de la inversión, por diversos factores, aunque la actividad debería ir de menos a más en el transcurso del año.
