Editorial

Deterioro de la posición financiera de empresas y familias

  • T+
  • T-

Compartir

Imagen foto_00000001

a publicación de las Cuentas Financieras por sector institucional por parte del Banco Central volvió a centrar la atención en el endeudamiento de las familias, que llegó al nivel récord de un 76,4% del ingreso disponible. Esta cifra relaciona el stock de deuda con el ingreso anual, y no representa, como suele leerse, la carga financiera mensual de las personas. A pesar de que es el nivel más alto registrado, se explica por la caída del ingreso más que por el aumento de la deuda.

Imagen foto_00000002

En efecto, el ingreso disponible de los hogares registró en el segundo trimestre una caída de 8% respecto al mismo período de 2019, la mayor desde 2003, cuando se inició la seria. A modo de comparación, en el peor trimestre de 2009 la caída fue de 0,3% anual, lo que evidencia la magnitud de la crisis que enfrentamos. Adicionalmente, la deuda hipotecaria representa un 55,5% del total, siendo la causa del aumento del endeudamiento, mientras la deuda de consumo como porcentaje del ingreso tiende a caer, a pesar de la fuerte disminución del ingreso.

El ratio de deuda de consumo bancaria está en el nivel más bajo desde el primer trimestre de 2015 (17,3% del ingreso), mientras que la deuda de consumo no bancaria (16,7%) se mantiene en un rango superior al promedio histórico. A pesar de la caída en el ingreso, las familias aumentaron su tasa de ahorro, producto de que la caída en el consumo superó a la del ingreso.

Las empresas, por su parte, también registraron un aumento del endeudamiento, en mucho mayor medida que los hogares: n 127,7% del PIB, con un alza de más de 20 puntos sobre la cifra de junio de 2019, y también la más alta de la serie, desde 2002. Es cierto que la significativa caída de los costos financieros resta comparabilidad a estos números a lo largo del tiempo, y que se debe considerar además que la depreciación del peso en el último año explica parte del aumento.

En definitiva, bastante de acuerdo con lo esperado, la crisis ha deteriorado la posición deudora de familias y empresas, lo que requiere atención, pero no parece llegar aún a niveles de cuidado.

Lo más leído