Editorial

El impacto de un dudoso “efecto Trump”

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El triunfo de Donald Trump ha polarizado a la opinión pública en EEUU. Su plan migratorio desató la ira de los liberales y su promesa de modificar el seguro de salud ha dividido a su propio partido. Incluso las empresas están sufriendo por sus continuas amenazas en Twitter.

Sin embargo, los mercados siguen enamorados del nuevo mandatario, con el Dow Jones escalando casi 15% desde su victoria. La confianza de los consumidores está en máximos de una década y las contrataciones de las empresas llegaron a un récord de tres años. A través de las redes sociales el presidente se ha encargado de subrayarlo, asociando así su propia figura a estos logros y ayudando a construir un mito en torno a un supuesto “efecto Trump”.

Incluso los empresarios, que en público sufren sus ataques mediáticos, admiten que su tono es completamente distinto cuando se reúnen en privado y destacan su capacidad de inspirar y liderar.

El viernes, el Departamento del Trabajo anunció cifras para el mercado laboral que superaron las proyecciones más optimistas. Aunque el repunte reflejó en gran parte factores puntuales, como un clima más benigno, esta fue la primera cifra que recogió el impacto de un mes completo del presidente en el cargo.

La mayoría de los economistas coinciden en advertir que los desequilibrios en el programa económico del nuevo presidente van a generar un repunte de corto plazo y riesgos a la larga.

Los dotes de Trump como un hombre del espectáculo podrían ayudar a crear un shock de confianza. Habrá que ver si es suficiente para iniciar un círculo virtuoso de recuperación económica, más allá de las deficiencias de su programa.

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