La amenaza digital llegó para quedarse
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Cuando toda la atención mundial estaba puesta en los crecientes riesgos políticos, como una crisis de gobernabilidad en EEUU, o una confrontación entre Donald Trump y el régimen comunista de Corea del Norte, un masivo ciberataque a nivel global vino a recordarnos que la principal característica de los denominados “cisnes negros”, es que las amenazas estallan precisamente cuando están fuera del radar de los expertos.
Las nuevas tecnologías están impulsando una profunda transformación de la economía global, que no sólo podría sostener una nueva ola de expansión. Nuevos desarrollos como la inteligencia artificial, la masificación de los robots y la internet de las cosas, pueden tener serios efectos disruptivos, no sólo para la actividad económica, sino también para toda la sociedad como un todo.
El alcance y masividad del último ataque fueron una señal de alerta sobre la creciente importancia que este tipo de riesgos puede plantear para una economía digital, y es un llamado de atención para que las autoridades los tomen en serio. Pese a que la primera ola de ataques parecía contenida ayer, los expertos concuerdan en que la amenaza digital llegó para quedarse.
