Momento clave en indicador de empleo

En la Encuesta Nacional de Empleo del INE para el trimestre enero-marzo, que se conocerá el jueves, se podrá apreciar una vez más cómo la positiva estacionalidad de los meses de verano va quedando a atrás para dar paso a la "normalidad". Es aquí cuando se apreciará realmente si la aparente robustez del mercado laboral es tal, en especial cuando el sector agrícola mostró una importante creación de empleo versus igual período del año anterior producto de una baja base de comparación debido de las heladas de 2014.

Variados antecedentes sugieren que lo que vendrá podría no ser grato.

Para el trimestre diciembre-febrero tanto la mantención en la tasa de desempleo respecto de un año atrás, así como la caída de la misma frente al mes precedente, responden en el primer caso a un pobre crecimiento tanto de la fuerza de trabajo como de la ocupación (0,6%) en 12 meses, mientras que en el segundo la disminución es la contracara de una ocupación que baja algo menos de lo que cae la fuerza de trabajo. La reciente Encuesta de la U. de Chile, tomada entre el 8 y el 14 de marzo, confirma lo anterior para el Gran Santiago: el desempleo aumenta 0,5 punto versus 12 meses atrás, por un crecimiento casi nulo de la ocupación (0,1%), pese a que quienes buscan empleo suben solo 0,6%, muy por debajo de los promedios historicos.

Otro antecedente, el Índice de Vacantes del Banco Central, que contabiliza los avisos de oferta de empleo en prensa dominical, viene cayendo desde comienzos de 2013, indicador que suele adelantarse y estar altamente correlacionado de manera inversa a la tasa de desempleo. Así parece difícil que, pese al aumento del gasto público, la situación de empleo no se deteriore más.