Editorial

Pensión Garantizada Universal: un paso positivo, pero insuficiente

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 pocos meses del fin de su mandato, el gobierno decidió avanzar hacia una pensión garantizada universal (PGU), luego de haberse generado un consenso bastante amplio en la necesidad de esta política. En general, la acogida ha sido favorable, aunque se han planteado dudas sobre la sostenibilidad del beneficio, producto de su costo fiscal creciente, debido al rápido envejecimiento de la población.

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En una reciente entrevista a este medio, el exintegrante de la Comisión Bravo y académico de la PUC, Hugo Cifuentes, señaló que la PGU era un paso en la dirección correcta, siendo una opción que están tomando países desarrollados y que recomiendan organismos internacionales. Pero ello sería insuficiente, porque si no se logran también mayores niveles de contribución al sistema, lo que ocurrirá finalmente es que, en vez de ser la PGU un complemento de la pensión autofinanciada, ocurrirá lo inverso: la pensión garantizada será el componente principal de la jubilación.

El punto es importante, por cuanto desnuda el problema fundamental de nuestro sistema de pensiones. De acuerdo con la información de la Superintendencia de Pensiones, en octubre la pensión promedio autofinanciada llegó a $255.000, y la mediana a $ 169.000. Esto significa que, para más de la mitad de los pensionados, el aporte de la PGU superaría la pensión que logran financiar.

Es evidente, entonces, la importante contribución que puede hacer la PGU para mejorar las pensiones, pero también es necesaria una mayor contribución de los trabajadores activos.

Avanzar en un componente de reparto, aumentando las cotizaciones actuales, presenta obvios inconvenientes, frente a aumentar la contribución al actual sistema de capitalización: dañan la formalidad por el componente de impuesto que generan; son muy susceptibles a las presiones de grupos de interés que pueden ser los potenciales beneficiarios; y la demografía los hace insostenibles en el tiempo.

Visto así, resulta preferible que las cotizaciones adicionales se destinen a capitalización, lo que además contribuye al crecimiento económico.

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