Editorial

Presupuesto 2018: mala técnica legislativa

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Recientemente se despachó el último Presupuesto para el Sector Público presentado por la actual administración. El gasto fiscal aumentará 3,9% en 2018, alcanzando más de US$ 70.000 millones, lo que cierra un ciclo de cuatro años donde el gasto público superó el crecimiento del país. El déficit fiscal efectivo se proyecta en 1,9% del PIB para el próximo año, con lo que la deuda bruta del gobierno central se habrá elevado de 12,7% del PIB en 2014 a casi 25% en 2018.

Preocupa además el legado de mala técnica legislativa que deja la administración saliente, caracterizado por el intento del Ejecutivo de legislar materias de carácter permanente a través de la Ley de Presupuestos, que en esencia es de carácter anual. El caso más criticado ha sido la glosa de gratuidad en educación superior aplicada en los últimos años, pero no es éste el único caso. En la tramitación de la Ley de Presupuestos de 2018 sorprendió la reactivación de la Empresa Pública SACOR SpA, donde a través de una glosa en el presupuesto de Corfo se capitalizó la empresa y amplió su giro con el fin de que ésta se haga cargo de la administración del programa de garantías de la Corporación, algo que normalmente hubiera requerido de una ley de quórum. Junto con ello, en el Serviu Metropolitano se entregaron nuevas facultades para crear una sociedad; mientras que en el articulado de la Ley se resolvió incorporar una nueva regulación para rendir los gastos reservados. Si bien algunas de estas situaciones fueron reconocidas durante el debate como soluciones provisorias, lo cierto es que la Ley de Presupuestos no debe ser el mecanismo para ello, de modo que es de esperar que no se repita en el futuro.

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