Un mercado laboral desigual

n reciente análisis del Centro de Estudios Financieros del ESE Business School, con datos de la Encuesta Casen de varios años y publicado en DF, concluye que el problema de segregación del mercado laboral chileno ha tendido a agravarse en el tiempo. Ni siquiera se trata de acceso al mercado laboral formal, sino de estar en la categoría de “ocupado”, es decir, trabajar una hora o más en la semana.

Es muy llamativo que en el 10% más pobre de la población, sólo tres de cada diez hombres mayores de 15 años tengan un trabajo, a la vez que sólo dos de cada diez mujeres de ese decil. En el 10% más rico, en cambio, un 84% de los hombres está ocupado, junto a un 70% de las mujeres, tasas incluso superiores al promedio de países de altos ingresos. En definitiva, las bajas tasas de ocupación en Chile tienen un evidente componente socio económico.

Pero no sólo eso, estas brechas en tasas de ocupación han aumentado en el tiempo, por lo que deberían ser un foco central en las políticas laborales. A modo de comparación, en 2011 estaba ocupado un 37% de los hombres del primer decil y un 19% de las mujeres, mientras que en el 10% más rico las tasas de ocupación eran de 78% para ellos y 60% para ellas. En síntesis, se observa un aumento de ocupación en los deciles altos, mientras que cae o se mantiene en los deciles bajos. El país no está creando puestos de trabajo suficientes para los sectores vulnerables, mientras sí lo hace para sectores medios y altos.

La conclusión en términos de políticas públicas parece bastante evidente. Lo primero es que se debe tener cuidado con reajustes muy elevados de salario mínimo, ya que dificultan el acceso al mercado laboral de los sectores de bajos ingresos; lo segundo es la necesidad de flexibilizar la legislación y los mecanismos de cuidado infantil, especialmente pensando en mujeres de ingresos bajos; y lo tercero, mejorar y focalizar la política de capacitación, el mejor camino para elevar la productividad laboral de esos grupos marginados del mercado del trabajo.