Editorial

Una llamada entre Washington y Beijing

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La semana pasada tuvo lugar el primer intercambio oficial directo entre el nuevo Presidente de los Estados Unidos y su homólogo chino. Que se tratara de una aparentemente cordial conversación telefónica de dos horas entre los líderes de las dos principales potencias económicas del mundo —y no de una dura andanada en redes sociales o a través de sus representantes diplomáticos— marca, al menos, un notorio cambio en las formas respecto del cuatrienio de Donald Trump.

Si ello es un anticipo de una relación más constructiva entre Washington y Beijing hacia el futuro, con externalidades positivas a nivel internacional, aún está por verse. Aun así, la llamada sí refleja expectativas propias y ajenas de un menor grado de tensión en la relación bilateral, tanto a nivel comercial como estratégico, que entregue señales de estabilidad en un mapa mundial donde se están redibujando áreas de influencia y realineando fuerzas.

Muchos de estos cambios tienen que ver, directa indirectamente, con el ascenso de China como potencia económica y actor geopolítico de primer orden, pese a no ser en la práctica una nación desarrollada. De hecho, la forma en que los respectivos gobiernos chino y estadounidense informaron la conversación entre sus líderes dice mucho sobre cómo cada uno entiende (y busca presentar) sus desafíos en el corto y mediano plazo: desde Washington, el énfasis estuvo es mantener una actitud firme ante China (en comercio, tecnología y DDHH, entre otros); desde Beijing, más acento en la cooperación y en los costos compartidos de una relación confrontacional.

Que Joe Biden y Xi Jinping se conozcan y hayan compartido muchas veces cuando ambos coincidieron como vicepresidentes de sus respectivos países, entre 2008 y 2012, agrega al vínculo bilateral una dimensión de la cual carecía en estos últimos cuatro años. Como líderes, su desafío será transformarla en una fuente de fortaleza, estabilidad y diálogo constructivo dentro de una relación que estará entre las más determinantes de este siglo.

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