Número 25

Estimados lectores, 

13.45 horas. Somos más de 80 personas esperando en una notaría. Llevo tanto rato esperando que el marcador de atención ha llegado dos veces a 100 y se resetea. Tengo el número E25 y vamos en el D97.  

En esa complicidad propia de las filas, termino conversando con el resto de los secuestrados  por los trámites. Tengo un emprendedor al lado que viene con un finiquito de un empleado y ha perdido toda una mañana que podría haber dedicado a mover su negocio. Más atrás hay una mujer que pidió permiso en la oficina para sacar una autorización de viaje a su hijo y que mira a cada rato la hora en el celular, nerviosa porque se ha ausentado varias horas. ¿Cuántas horas pasaremos los chilenos cada año para que una persona en un mesón nos timbre un papel?  

Cada cierto tiempo se activa la alarma pública y aparece la necesidad de reformar el sistema de notarios con la correspondiente polémica acerca de las definiciones de lo que es la fe pública. Se hacen listas de trámites a eliminar (lo más razonable) o se apunta a sumar más notarios (menos razonable) pero se adormece el debate a los pocos días. Ya van más de 30 intentos legislativos que quedan en nada.

Curioso porque en esto deberíamos estar  todos los chilenos de acuerdo. O casi todos. Sigo en mi espera y les dejo bien acompañados con una selección de buenas entrevistas que llevamos esta semana en el Diario Financiero. 

Marily