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Las nuevas metas de Valente: una hoja de ruta para el crecimiento sostenible a 2045 y crear un área de ciudades

El próximo 27 de agosto presentará al directorio los detalles del proyecto Ciudades y una propuesta para aumentar el endowment de la institución.

Por: Alejandra Rivera | Publicado: Lunes 5 de agosto de 2019 a las 04:00 hrs.
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Foto: Rodolfo Jara
Foto: Rodolfo Jara

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Hace menos de un mes que el exministro de Economía, José Ramón Valente, aterrizó en la presidencia de Fundación Chile (FCh). Se siente cómodo y ya tiene, al menos, tres proyectos bajo el brazo. Si bien quedó dolido tras la temprana salida del gobierno, hoy mira su paso por la cartera desde otra perspectiva.

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“En 15 meses igual se pueden hacer cosas y hay proyectos interesantes que quedaron como legado, entonces hay un cambio de switch, desde qué pena que haya concluido, a qué bueno haber tenido la oportunidad de haber cooperado”, afirma.

En la Fundación ya tiene metas ambiciosas: articular la creación de una hoja de ruta para el crecimiento sostenible de Chile en los próximos 25 años, crear una nueva área de ciudades y ampliar el endowment incorporando más inversionistas empresariales y de paso, diversificar el directorio en el que hoy sólo se sientan el gobierno y BHP.

“Es urgente ponernos de acuerdo en diseñar las políticas públicas para promover un crecimiento sostenible en los próximos 25 años, y eso es labor del gobierno, del Congreso, de los gremios y de otras instituciones como Fundación Chile”, dice.

Esta convicción lo llevó a declinar una oferta de trabajo en la Organización para el Desarrollo Económicos (OCDE) en París y quedarse en Chile. “El país está trazando las bases para su crecimiento en los próximos años, y en ese sentido, prefiero participar de ese desafío que estar fuera”, afirma.

-¿Cuál es el rol que debería jugar FCh en su gestión?

-La fundación puede ser un actor muy relevante en ayudar a trazar esta hoja de ruta del crecimiento sostenible de Chile en los próximos 25 años. Por dos cosas: porque puede convocar a actores al debate de cuál debe ser esa estrategia, y por lo tanto, que salga esa estrategia. La fundación es vista como una institución sin color político y sin ideología, sus resultados vienen desde la ejecución y de la experiencia. Y segundo, por las acciones concretas que está haciendo para contribuir a este desarrollo sostenible, en distintas industrias y sectores, en temas de habilidades para el siglo XXI, agua, innovación, desarrollo de proveedores, emprendimiento, economía circular.

-Usted creó tres oficinas en el ministerio. ¿Viene con algún proyecto bajo el brazo?

-En el mundo se está estudiando el aporte de las ciudades al progreso de los países en los próximos 50 años. La gente se está volcando masivamente a las ciudades, un lugar de encuentro. Ciudades que funcionen bien son un aporte al crecimiento y productividad de los países. Por lo tanto, tener una mirada integral de su crecimiento es algo que FCh podría abordar, sería una nueva área muy relevante para el futuro.

-¿Y qué materias abordarán en esta nueva área?

-La fundación tiene una metodología para abordar estos temas. Primero hacer una exploración, ver toda la información que existe y tratar de ponerle un perímetro a este tema. Están los espacios públicos, el desarrollo urbanístico, la inclusión, -qué tan inclusiva es la ciudad y pensar si se está colocando a la gente con menos recursos fuera de ella, y por lo tanto generando desigualdad-, la parte smart cites -conectividad, los sensores y el big data- y el transporte. Ciudades que funcionan permiten desarrollo, mucha productividad y aportan a la calidad de vida de las personas, que puedan salir a trotar, andar en bicicleta, con tiempos de transporte cortos y hacer una vida familiar y de trabajo agradable. Si Chile aspira a ser un país desarrollado al 2030, tenemos que ponernos a trabajar inmediatamente en cómo nuestras principales ciudades están preparándose -o no- para ese desafío.

-¿Tiene un diagnóstico preliminar en torno a Santiago?

-Como pasa muchas veces, tenemos una dispersión de iniciativas. Hay mucha gente proponiendo cosas, pero en forma dispersa, y la Fundación, en su rol articulador, puede sentar a la gente interesada en una mesa. Por ejemplo, convocar a las personas que están pensando en smart cities, en electromovilidad, en espacios públicos o en una ciudad inclusiva y proponer políticas consistentes. Santiago tiene avances muy importantes, por ejemplo, el gobierno ha contribuido con un plan de Metro, el plan RED con buses eléctricos, pero estamos al debe en la parte urbanística, en tiempos de transporte y estamos detrás de muchas otras ciudades en uso de big data para que funcione mejor.

-¿Ya están convocando a actores?

-Hemos tenido muchas reuniones, hemos estado convocando gente de desarrollando el perímetro en torno al estudio y cómo abordarlo. También nos hemos juntado con expertos de otros países. Hay ciudades como Singapur, Sidney, Londres, Boston, que se han propuesto estudiar cómo lograr que la ciudad sea un polo atractivo para vivir en ella.

Diversificar el directorio

-¿Considera revisar algunos programas o políticas de FCh?

-La fundación tiene un endowment de US$ 40 millones aportado por el Estado y BHP, es relativamente chico para el tamaño de las actividades que realiza. Me gustaría cooperar y aumentarlo y, con eso, hacer más diverso el gobierno corporativo incorporando otras empresas; hoy la mitad es el gobierno de Chile y la otra de BHP.

-¿Están en conversaciones con actores?

-Estamos diseñando el modelo. Estuve en Nueva York la semana pasada y me reuní con otras fundaciones para ver cómo lo hacían, por ejemplo, con la Rockefeller Foundation. En la próxima sesión del directorio que es el 27 de agosto, presentaré un plan al directorio de los dos temas, de ciudades y de endowment. El directorio tiene que definir las metas del endowment.

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