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ORSAI: Crowdfunding y producción colectiva en el cine

El escritor Hernán Casciari fundador de la revista cultural Orsai y Christian Basilis, fundadores de la revista ORSAI idearon una forma de financiación colectiva para llevar a la pantalla la novela argentina “La Uruguaya”.

Por: | Publicado: Miércoles 18 de agosto de 2021 a las 05:00 hrs.
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Desde su oficina en el barrio Villa Urquiza de la capital argentina, el escritor Hernán Casciari fundador de la revista cultural Orsai se da un espacio en medio de su agitada agenda para conversar con Diario Financiero.

La ya mítica revista que se publica en papel, en forma trimestral o bimestral, sin publicidad ni subsidios privados o estatales este año cumplió 11 años de impresión ininterrumpida. Ojo: sólo con el aporte de los lectores. Tal ha sido el éxito de la edictorial que fundó con Christian "Chiri" Basilis, las 6 mil unidades que imprimen -tiraje que cubre los altísimos costos de la edición que sobrepasa las 280 páginas- se venden a US $20 incluso antes de aparecer en los kioskos. Los que tienen suerte, la pueden encontrar en Mercado Libre o en la tienda que Casciari abrió en la capital argentina donde además vende sus más de 15 libros.

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Otra particularidad para la industria de las revistas: la pandemia no significó mayor problema. "Te diría que los escritores escribían con más calma, con más libertad, mucho más creativos", señala el aregentino. Apenas tienen un staff de 12 personas, pero cuentan con más de 200 colaboradores alrededor del mundo de la talla de Amélie Nothomb - escritora belga elegida miembro de la Real Academia Belga- y el físico teórico argentino José Edelstein, quien consiguió la única y última entrevista en vivo con Stephen Hawking en su propia casa.

Inspirado en el concepto de que las producciones colaborativas le resultaban bien decidieron aventurarse en la disciplina audiovisual.

¿Cine colectivo?

Este año Casciari y Basilis idearon una forma de financiación colectiva (basada en su experiencia en la revista y editorial Orsai) para llevar a la pantalla la novela argentina de Pedro Mairal “La Uruguaya”.

“El proyecto se trata de una película financiada íntegramente por sus socios productores, sin subsidios ni pautas publicitarias, con un mecanismo ideado por nosotros, señala Casciari.

Con el objetivo de lograr la producción, se pusieron a la venta seis mil bonos con un valor de 100 dólares cada uno, y se les dio la posibilidad a todos los socios de la comunidad de comprar un mínimo de un bono -el cual es entregado en un formato tipo vale vista- y un máximo de doscientas "acciones". Pero con una salvedad: “No se trata de un grupo de mecenas que aportaba dinero para financiar un producto por amor al arte”, aclara el escritor argentino. "Ellos participan activamente en todo el proceso creativo". 

Por el contrario: todas las ganancias que obtenga la película serán repartidas en forma proporcional entre los socios productores o “accionista”. El resultado fue que en menos de dos meses se agotaron los bonos y se consiguió algo excepcional en el universo del cine: recaudar la totalidad del dinero -US $600 mil para producir una película antes de dar el primer paso.

El argentino compró los derechos de La Uruguaya, una novela de 2016 del también trasandino Pedro Mairal. Un libro que fascinó tanto a Casciani, que lo único que quería era convertirla en película.

 Dos mil productores 

Para llevar adelante la aventura, Orsai convocó a Ana García Blaya para que se convirtiera en la directora de la película. La joven directora había sido reconocida por su ópera prima Las buenas intenciones, con distinciones en los festivales de cine de Toronto y San Sebastián. No solo aceptó la propuesta, sino que pidió que su participación en su película se le pagase íntegramente con bonos.

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En paralelo con el proceso creativo de la película, la Comunidad Orsai creó una aplicación, exclusiva para quienes compraron bonos, en donde se debate, se propone, se conversa con los directores de todas las áreas (arte, guion, finanzas, fotografía, y más) e incluso se toman decisiones con la lógica de un congreso.

Este democrático sistema de casting se inició con una convocatoria a actrices uruguayas de entre 25 y 30 años y actores argentinos de entre 43 y 47 años. Los actores seleccionados fueron agrupados en duplas y evaluados por el equipo de la película y los "productores asociados" (los 2000 inversores privados por crowdfunding), que finalmente votaron a través de internet.

Así, los socios participaron en encuestas no vinculantes —con la finalidad de proponer y debatir— y en otras que sí fueron vinculantes y sus resultados debieron acatarse sin protestar. Para ello, la aplicación cuenta con un sistema de votación muy simple, que permite que los casi dos mil socios voten desde sus dispositivos móviles, con total transparencia y a la vista de todos.

Además, semanalmente se publicaba el Podcast de La Uruguaya, con entrevistas, novedades y participación de los protagonistas de la película, así como también los streaming con conversaciones en vivo con integrantes del staff.

"Los socios productores tuvieron la posibilidad de espiar las reuniones por Zoom entre los miembros del equipo, lo que lo convierte todo el proceso creativo en una auténtica experiencia participativa", señala el escritor.

El rodaje de esta aventura —como sucede en la novela— ocurrió entre Buenos Aires y Montevideo. Para contar el qué y el jefe de guion Christian Basilis se rodeó de un equipo mixto de guionistas: algunos dando sus primeros pasos y otros con experiencia, como es el caso de Josefina Licitra, escritora y editora.

Al poco tiempo del inicio de la aventura, un socio productor propuso contactar a un director de fotografía de prestigio mundial para las escenas montevideanas. Después de recibir la propuesta y dar un sí rotundo, Cesar Charlone (director de fotografía de «Ciudad de Dios» y «Los dos papas», entre otras), se sumó al proyecto La Uruguaya junto a la joven directora de fotografía Florencia Mamberti.

La trama

La obra que cuenta la historia de Lucas Pereyra, un escritor argentino que viaja a Uruguay en barco por el día para ir a buscar unos dólares que cobró por la venta de un libro. En Montevideo tiene pactado un encuentro secreto. Pero, como suele ocurrir, no todo sale como se planea.

"Este es el proyecto 2021”, dice el escritor, quien detalla que la preproducción fue a mediados de marzo y el rodaje en junio.  El estreno está previsto para el 28 de diciembre de este año en Brasil y Montevideo de manera exclusiva para los accionistas quienes tendrán la oportunidad de tomar una última decisión: el final. En Chile se verá por plataforma via streaming y lo más probable es que se pueda ver a parti de febrero. 

Lo que viene

Recién hace una semana y teniendo en marcha la producción de La Uruguaya, Hernán Casciari quiso aventurarse en un nuevo desafío, esta vez para ser estrenado en 2022. Se trata de una miniserie de 6 capítulos basada en una idea original del escritor argentino: la historia de un episodio dramático que le sucedió a Chichita, madre de Casciari en la ciudad de Mercedes. “De hecho, lo contaremos por primera vez. Y hablo en plural porque Chiri y yo estábamos en Mercedes ese día -de hecho, los productores asociados tendrán que buscar actores que hagan de nosotros- por lo que escribir esta miniserie (para Chiri y para mí) será como volver a vivir aquel infierno” confiesa el argentino y agrega: “Quizás ahora, que pasaron algunos años, podamos reírnos un poco y nos salga una comedia negra. Pero te juro que mientras ocurría fue una de las situaciones más espantosas de nuestras vidas”.

En esta ocasión el formato será diferente: no habrá un tope de financiamiento como en el caso de La Uruguaya que se pusieron US $600 mil dólares como tope máximo. El accionista productor interesado tendrá la posibilidad de comprar bonos a través de cualquier tipo de pago e incluso en criptomonedas.

Para finalizar el autor de la miniserie señala: “El guion durará lo mismo que la financiación: de agosto a diciembre. De este modo definiremos en tiempo real la caja de producción. Es decir: si será ‘policía gordo’ o ‘helicópteros de Gendarmería’.

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