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Memorables recuerdos dejó Stephen Hawking en Chile

El físico Claudio Bunster, Alfredo Navarro, del Centro Cultural Estación Mapocho, y la expresidenta Michelle Bachelet estuvieron con él.

Por: | Publicado: Jueves 15 de marzo de 2018 a las 04:00 hrs.
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A los 76 años murió Stephen Hawking, dejando un inmenso legado a la ciencia. Para comprender su alcance, fue calificado como el científico más importante después de Albert Einstein.

Dos visitas conocidas a Chile, en 1997 y 2008, dejaron huella tanto en el poseedor de una cualidad única de comunicar conceptos cosmológicos complejos al público general, como a quienes compartieron con él.

Tal vez quien más cerca estuvo del científico, el también investigador Claudio Bunster, director del Centro de Estudios Científicos (CECs), prefirió no emitir comentarios tras conocer su deceso.

De su primera visita, en 1997, desde el CECs destacaron que participó en un seminario científico en que se discutieron aspectos fundamentales que involucran tanto a la gravitación como a la mecánica cuántica, desde la teoría de los agujeros negros a la totalidad del universo. El seminario tuvo lugar, en primera instancia, en la antigua sede de Santiago del CECs, en calle Presidente Errázuriz, en las Condes.

Tras cumplir este evento se trasladaron a territorio antártico. Para estos efectos, la Fuerza Aérea transportó al grupo hasta la Base Aérea Teniente Marsh en la Isla Rey Jorge. Sobre esta visita Hawking dijo a The Guardian que dicha experiencia había sido “la más emocionante de su carrera”.

Helado de vainilla

Quien también tuvo oportunidad de compartir con el fallecido científico fue Arturo Navarro, director Ejecutivo del Centro Cultural Estación Mapocho, cuando en 1997 el británico dictó una charla de no más de una hora ante más de 4 mil espectadores, en un ambiente, según recuerda, de absoluta expectación. “Me dejó la impresión de una bellísima persona, muy sensible, una persona de una inteligencia que está demás decirlo y que había superado con creces las dificultades que la vida le había puesto”, recordó Navarro.

Sobre esa jornada rememoró. “De pronto se apagan las luces y se produce un silencio espectacular solo roto por la melodía de The Wall, de Pink Floyd. Después de eso un foco se dirige hacia la puerta donde sale hacia el centro del escenario. En todo ese transcurso, recurriendo a un lugar común, no voló una mosca. Solamente se sentía el ruido del motor de su silla de ruedas”.

Tanto como la expectación en torno a su visita, recuerda Navarro, una anécdota también lo hace recordar la figura de Hawking. “Habíamos preparado una especie de camarín, un vestidor para él. Una de sus dos enfermeras comenzó a moler un plátano, con la intención de dárselo. Él con una cara de cabro chico, quiso decir ‘no me gusta el plátano, no quiero más plátano’. Al mismo tiempo me mira con cara de help y escribió en su computador vanilla ice cream (…) Fuimos a comprar el helado de vainilla, lo trajimos en cinco minutos, se lo comió y quedó feliz. Esa mirada de gratitud la voy a recordar siempre”.

Finalmente el científico británico dejó estampada su huella en el libro de oro de visitas del centro cultural Estación Mapocho, imagen que ayer compartió Navarro a través de su cuenta de Twitter.

En su visita en 2008, la expresidenta Michelle Bachelet también compartió con Hawking en La Moneda. En aquella oportunidad, la exmandataria le regaló el libro de Pablo Neruda, “Las Caracolas”.

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