El acceso a la información financiera ha sido una de las herramientas más recientes a las que ha recurrido el Servicio de Impuestos Internos (SII) para aumentar la fiscalización a contribuyentes, ya que permite contrastar ingresos eventualmente no reportados, lo que incide en el pago de los gravámenes anuales.
27 mil personas tenían saldos en sus cuentas sobre UF 1.500 y no declararon sus ingresos al Fisco en 2024.
En lo más reciente, la Ley de Cumplimiento Tributario incorporó la obligación de las entidades financieras de informarle al fiscalizador sobre los contribuyentes que hayan recibido más de 50 transferencias desde distintas cuentas en el lapso de un mes, y más de 100 en el transcurso de un semestre. ¿El fin? Pesquisar que no se estén disfrazando ventas como abonos en cuentas financieras, lo que influye sobre la tributación, por ejemplo, del IVA.
Sin embargo, hace prácticamente tres años, el Congreso dio luz verde a otro cambio que ya está generando resultados para el SII: la ley que obliga a los bancos e instituciones financieras a informar al servicio los saldos de las cuentas de sus clientes que superen las UF 1.500 al mes. O sea, más de $ 52,9 millones.
Esto se realiza a través de la declaración jurada 1955. En la Operación Renta de 2024 (con información comercial de 2023), el organismo contó por primera vez con datos de esta naturaleza para un año completo, ya que el proceso de renta 2023 incorporó solamente los últimos tres meses del año 2022.

Así, en la más reciente Operación Renta, 45 bancos e instituciones financieras le entregaron al SII información sobre abonos y saldos en las cuentas financieras de 555.982 contribuyentes, 131.770 contribuyentes más que en el ejercicio anterior. De ellos, 255.857 corresponden a empresas y 300.125 a personas.
Lo que se detectó
El formulario debe ser presentado por los bancos, cooperativas de ahorro y crédito, compañías de seguros y entidades privadas de depósito y custodia de valores.
En el proceso de fiscalización y análisis de estos antecedentes, el servicio detectó potenciales incumplimientos, mediante la subdeclaración de ingresos, incluso la no declaración de rentas, además de casos de empresas que están tributando en el régimen Propyme General, debiendo hacerlo en uno con una tasa de impuestos mayor. Esto, pues exceden el límite de ingresos para pertenecer al sistema para las pequeñas empresas.
En el caso de las personas, se identificaron contribuyentes informados cuya fecha de defunción es mayor a tres años, por lo que se busca determinar si se ha pagado adecuadamente el impuesto a las herencias y donaciones.
Con esta mayor información disponible, explicó el director del SII, Javier Etcheberry, “confirmamos, en primer lugar, que es un porcentaje minoritario de contribuyentes el que presenta algún tipo de inconsistencias entre los abonos y saldos en sus cuentas y los datos que manejamos sobre ellos, como servicio”.
Lo anterior, agregó, “nos permite separar a los buenos contribuyentes, aquellos que cumplen adecuadamente sus obligaciones tributarias, de aquellos que presentan algún tipo de riesgo de incumplimiento, para que estos sean revisados con mayor profundidad”.
La subdirectora de Fiscalización del organismo, Carolina Saravia, destacó que en el marco de la Operación Renta es “muy importante” que los contribuyentes confirmen con la información de la declaración jurada 1955 que esté declarando todos los ingresos, para evitar que en los procesos de revisión de las declaraciones, donde el SII recurre a todas las fuentes de información con que contamos, “se detecten inconsistencias que puedan significar procesos de fiscalización posteriores”.
Personas en tramos exentos
Según el servicio, del total de empresas informadas, 52.333 no habían declarado renta, por lo que se les aplicaron diversas acciones de tratamiento. Esto derivó en que 32.913 empresas cumplieron con su declaración de renta, lo que equivale a un 63%, por lo que hoy 19.420 aún no presentan su declaración de renta de 2024 pese a contar con abonos en sus cuentas por $ 44.284 millones en promedio al año.
En cuanto a las personas, 27.318 aparecían como no declarantes de renta en 2024. A partir de las acciones aplicadas por el SII, este número se redujo a 18.303, por lo que el 33% de las personas no declarantes informadas en 2024 corrigió su situación.
Otros hallazgos: 30.039 personas con abonos sobre UF 1.500 en sus cuentas están clasificadas en el tramo exento del impuesto a la renta (o sea, tienen ingresos anuales declarados inferiores a $ 10.402.992).
“En estos casos, se continúa analizando la información de los abonos de estos contribuyentes, con el objeto de determinar las acciones de tratamiento por una posible subdeclaración de ingresos que lo ubiquen en un tramo distinto del Impuesto Global Complementario y que no corresponda a situaciones excepcionales como una indemnización, una herencia u otros ingresos que no deban declararse”, agregaron desde el SII.
Asimismo, 53.750 personas corresponden a altos patrimonios, donde el servicio está realizando las validaciones necesarias para determinar si están pagando los impuestos que corresponde según el tramo de ingresos de cada uno.