Su último mensaje como gerente general de Enel Distribución Chile dejó Víctor Tavera en la carta contenida en la memoria anual de la compañía. En la misiva, firmada junto a la presidenta ad-hoc del directorio, Viviana Vitto, el ejecutivo -que dejó el cargo el 7 de abril- destacaron logros como el incremento de nuevas conexiones en la Región Metropolitana y que al cierre de 2024 la firma cumplió 30 meses sin incidentes en operaciones en terreno, pero también abordaron los extensos cortes de electricidad del invierno pasado.
"Este 2024, el país y la compañía se vieron enfrentados a grandes desafíos. El año estuvo marcado por un evento climático extremo, inédito, e irresistible ocurrido el 1 y 2 de agosto, con vientos de hasta 124 kilómetros por hora, registrando las rachas más fuertes en la historia de la Región Metropolitana", describieron de entrada.
Aseguraron que este evento provocó severos daños a la red de distribución eléctrica y muchos de sus clientes resultaron afectados por prolongados cortes de suministro: "Enel Distribución trabajó incansablemente para lograr la reposición del servicio, poniendo todos sus esfuerzos y recursos a disposición de la emergencia, incluyendo apoyo internacional del Grupo Enel, y no descansó hasta reestablecer el 100% del servicio a todos sus clientes".
En paralelo a lo anterior, los ejecutivos destacaron que fue la primera empresa en solicitar de manera voluntaria y proactiva un Procedimiento Voluntario Colectivo (PVC), en beneficio de los clientes afectados por los cortes provocados por "el inédito temporal" del 1 y 2 de agosto.
Según detallaron, fenómenos como éste implicaron que los gastos fijos de explotación aumentaran $ 12.219 millones, como consecuencia de mayores costos en servicios de mantenimiento y reparación de redes, a los que también se sumaron costos más altos en aprovisionamientos y servicios.
Como resultado de los factores mencionados, agregaron, el EBITDA disminuyó 34,5% a diciembre de 2024, totalizando $ 60.469 millones, y el beneficio (pérdida) neto atribuible a los accionistas de Enel Distribución disminuyó $ 39.488 millones, al pasar de una ganancia de $ 14.003 millones a diciembre de 2023, a un resultado negativo de $ 25.486 millones a diciembre de 2024.
Los ejecutivos precisaron que Enel Distribución sigue trabajando en la mejora operacional, la comunicación integrada entre áreas y el monitoreo constante y metódico de los principales indicadores operacionales, técnicos y comerciales de la empresa.
Entre otros aspectos, puntualizaron que, dado que el 80% de la red de distribución eléctrica es aérea, cada año, Enel Distribución ejecuta un plan de manejo de arbolado que apunta a prevenir y enfrentar contingencias. Al cierre de 2024, dijeron, las cuadrillas especializadas de la compañía despejaron más de 77 mil árboles en coordinación con los 33 municipios de su zona de concesión en la Región Metropolitana.
También recordaron que en 2024 el Tiempo de Interrupción Promedio por Cliente (SAIDI) fue un 23% mayor que el año anterior, llegando a 150 minutos. "Este incremento, se atribuye principalmente a las intensas emergencias ocurridas durante el año, que fueron consecuencia de condiciones climáticas excepcionalmente adversas. Respecto al indicador de Frecuencia de Interrupción Promedio por Cliente (SAIFI), éste alcanzó a 1,44 veces en 2024, 15% superior a 2023", detallaron.
Los ejecutivos reflexionaron sobre los desafíos del sector de la distribución eléctrica. "Estamos convencidos en que tenemos que avanzar en una reforma a la regulación de la distribución eléctrica, que promueva las inversiones necesarias para actualizar las redes de acuerdo con los nuevos requerimientos de la población", sentenciaron.
En esa línea, dijeron creer que "los desafíos que supone la transición energética a nivel de distribución deben ser apoyados de una profunda reforma (...) Es necesario mejorar la calidad de suministro y aumentar la resiliencia de las redes frente a eventos climáticos extremos, que son cada vez más frecuentes, y prepararnos a fenómenos como el robo de cables y el crecimiento de campamentos".
Y recalcaron: "Es importante que la reforma sea abordada lo antes posible, para tener capacidad de reacción en el futuro frente a las contingencias climáticas. Las familias chilenas necesitan y merecen un servicio eléctrico que les permita ser más protagonistas de la transición energética".
Caducidad de la concesión
Si bien los ejecutivos de Enel Distribución no aludieron al proceso impulsado para las autoridades donde la firma podría perder su concesión, el viernes, el presidente del directorio de Enel Chile, Marcelo Castillo, y el CEO, Giuseppe Turchiarelli, sí lo hicieron en su carta a los accionistas que fue parte de la memoria de esa compañía.
A pesar del carácter "inédito, irresistible e imprevisible del evento climático ocurrido en agosto del 2024 y de los esfuerzos extraordinarios que Enel Distribución ha puesto en marcha", los ejecutivos de Enel Chile indicaron que el Gobierno sigue adelante con el estudio para evaluar el posible cese de la concesión de Enel Distribución.
"Estamos convencidos de que un eventual proceso que resulte en una posible declaración de caducidad de la concesión no se sustentaría en bases técnicas sólidas y así lo demostraremos, ya que estamos seguros, con el debido respaldo de distintos expertos en la materia, que Enel Distribución ha cumplido sustancialmente con sus obligaciones bajo la concesión y bajo la regulación, sumado a que se origina en un evento inédito no previsto en la regulación eléctrica", sentenciaron en su mensaje.
Asimismo, aseguraron que "sin duda estamos frente a una encrucijada en la distribución". "Esto solo es posible con una reforma a la regulación de la distribución, que incentive y retribuya las inversiones necesarias para habilitar la transición energética y preparar nuestras redes frente a los fenómenos del cambio climático, que son cada vez más frecuentes, reforzando infraestructuras críticas necesarias para el suministro seguro de energía, con la calidad que todo el país merece", enfatizaron.
En el detalle, plantearon que en distribución se enfrentan retos relevantes. En primer lugar, advirtieron, "la rentabilidad de este negocio se redujo drásticamente". En segundo lugar, señalaron que el Valor Agregado de Distribución (VAD) 2020-2024 se retrasó, ya que la tarifa que debía publicarse en 2020 no se actualizó hasta junio de 2024, creando incertidumbre en las empresas distribuidoras que, a pesar de aquello, siguieron invirtiendo para mantener un servicio adecuado a los clientes.