A cambiar Chile: la importancia de nuestras ideas
Los jóvenes debemos hacernos partícipes de una nueva generación...
Los jóvenes debemos hacernos partícipes de una nueva generación, que debe estar presente en las instancias de participación cívica con profundo sentido republicano y con un compromiso social inspirado en la dignidad de las personas. Sin embargo, no lograremos jamás consolidar auténticos cambios positivos para Chile si no entendemos que aquello que debe movilizar nuestras conciencias son las ideas, las cuales son finalmente los verdaderos motores del cambio social y cultural que los jóvenes debemos promover.
Las ideas se transforman para las personas en profundas convicciones, y éstas sólo pueden desarrollarse a través de un proceso de formación intelectual profundo, en el cual deben tratarse a diversos temas y autores, partiendo por aquellos cuyo pensamiento aportó a formar las bases de nuestra cultura: los clásicos.
Este fin de semana fue la IV Convención Nacional de Chile Siempre, instancia de cuatro días de formación, en la cual participan los jóvenes de los proyectos de la fundación. Así pudimos confirmar una vez más la importancia de las ideas. Dentro de las numerosas charlas que hubo discutimos sobre política con el ex ministro Francisco Vidal, hablamos de universidad con el rector de la Universidad Católica, conocimos a los clásicos con la historiadora Catalina Balmaceda y conversamos sobre los principios rectores del orden social con Julio Isamit, director del Instituto Res Pública.
Todo esto nos permitió consolidar el deseo de un país en el cual los chilenos valoren el sentido de la dignidad de todas las personas, junto con el respeto por su libertad y la importancia de la responsabilidad. Hoy estamos más comprometidos a trabajar por una sociedad donde la igualdad de oportunidades se convierta en una realidad, lo que implica un esfuerzo siempre activo en la educación.
Una vez más hemos confirmado la importancia de la solidaridad y en la subsidiariedad como principios que deben regir el orden social, puesto que sabemos que tanto las personas como el Estado tienen funciones que exigen tanto un adecuado respeto y colaboración, y un compromiso decidido por el bien del país. Para ello, pocas cosas tienen más importancia de la sociedad civil, que entendemos que debe consolidarse como el canal de expresión ciudadana.
El desafío es consolidar un Chile en el cual culturalmente logremos impulsar transformaciones que signifiquen el fortalecimiento real de estas ideas junto con los logros sociales que urge realizar.