El presupuesto y el precio del cobre

Con la presentación del Estado de la Hacienda Pública se inició formalmente esta semana el debate legislativo del proyecto de ley de Presupuesto de la Nación 2012, que tiene como plazo de desarrollo hasta fines de noviembre.

En este marco, el titular de la citada cartera, Felipe Larraín, dio a conocer los supuestos detrás de la elaboración de la iniciativa, que contempla -en lo esencial- un crecimiento del PIB de 5% el próximo año, una expansión del gasto del mismo orden y un precio promedio del cobre de US$ 3,7 la libra.

Más explícito aún, el secretario de Estado advirtió que no se trata de un proyecto de presupuestos para enfrentar una crisis -que no se sabe si se concretará o no- sino que más bien consideró un escenario de desaceleración de la actividad.

Si se atiende la postura del ministro, que bien puede dar pie a otro debate, lo cierto es que los supuestos aparecen en línea con las estimaciones del Banco Central y organismos internacionales y también avalados por lo certero que resultaron los mismos parámetros en que basó el presupuesto de este ejercicio.

No obstante, un punto que llama especialmente la atención dado el actual contexto es el valor previsto para el cobre, fuente de un alto porcentaje de los ingresos del país. Si bien a la fecha, el precio promedio se mantiene sobre los US$ 4, la trayectoria a la baja de las últimas semanas parecía sugerir un supuesto más acotado.

De hecho, los futuros en la Bolsa de Metales de Londres a 15 meses y 27 meses se sitúan más cerca de US$ 3 que de US$ 4. Y de deteriorarse más el escenario externo, los commodities siguen siendo candidatos a ver un ajuste mayor en sus precios.