El "coqueteo" del gobierno con bancada lndependientes-PRI para destrabar su agenda

Por M. Helguero / A. Chávez


“No nos den un portazo en la cara”, con estas palabras los ministros de Hacienda, Felipe Larraín y de la Secretaría General de la Presidencia, Cristián Larroulet, comenzaron el diálogo con la bancada de diputados Independientes-PRI el pasado martes en el Congreso.

Ambos secretarios de Estado llegaron hasta las oficinas de la vicepresidencia de la Cámara de Diputados, comandada por el también titular del PRI, Pedro Araya. La reunión se concretó pasadas las 19:00 horas y tenía por objetivo iniciar una suerte de “noviazgo” con los parlamentarios, que a la fecha, se han convertido en un voto clave al momento de inclinar la balanza a favor o en contra de los proyectos emblemáticos del Ejecutivo.

Pero para pavimentar el camino, horas antes, Araya habría sostenido un encuentro privado con el ministro Larroulet. Casi dos horas duró la citaen que ambos personeros pusieron sus cartas sobre la mesa. Mientras el gobierno le pidió directamente “cierto grado de flexibilidad” y el apoyo de los 5 parlamentarios a la agenda legislativa de La Moneda, el legislador le habría manifestado la voluntad de avanzar en una agenda común de carácter nacional y regional, aunque también advirtió que “no estarían dispuestos a entregar un cheque en blanco”.

Araya le expuso a Larroulet que como bancada no están de acuerdo con el “diálogo de sordos y el ambiente beligerante” en que están enfrascados el gobierno y la Concertación. De ahí que propuso “transformarse en un puente” para abrir canales de diálogo y ayudar a destrabar determinadas iniciativas de ley del Ejecutivo, por lo pronto, salario mínimo, 7% de los jubilados y la extensión del post natal.

Pero ese apoyo no sería “irrestricto e incondicional” -dicen cercanos a Araya- porque como representantes del PRI no estarían dispuestos a ir en contra de sus principios, dado que el objetivo final es “visibilizarse ante la ciudadanía”. La señal que dieron, al rechazar el reajuste del salario mínimo propuesto por el gobierno e inclinarse por apoyar la solicitud del presidente de la CUT, Arturo Martínez, quien quiere un aumento de 10,46% equivalente a $ 190 mil.

Reunión ampliada


A la bilateral que sostuvieron Larroulet y Araya, le siguió el encuentro donde se sumaron el ministro Larraín, y los diputados Miodrag Marinovic, Pedro Velásquez, Marta Isasi, y la diputada Alejandra Sepúlveda, quien llegó al final de la cita. Pero este encuentro no fue casual, pues se concretó luego que el lunes en La Moneda, el presidente de la República, Sebastián Piñera, recibiera a los líderes de la Concertación y donde más que acercar posiciones, éstas se radicalizaron.

En medio de este panorama, los titulares de la Segpres y Hacienda no hicieron más que iniciar la búsqueda de una eventual alianza con los independientes. Y es que el diagnóstico que hacen en palacio da cuenta que con una “oposición atrincherada en el Senado”, el camino para sacar adelante la agenda legislativa del Ejecutivo es concentrarse en buscar acuerdos en la Cámara de Diputados, punto que también comparten los cinco parlamentarios y que lo remarcaron en la cita.

De ahí que el diputado por Punta Arenas, Miodrag Marinovic (IND), recuerda que “los independientes hemos demostrado que más allá de los dividendos político-partidistas, estamos legislando a favor del país sin extremismos ni apasionamientos”. No obstante, también acusa que “el Ejecutivo lleva un año y medio perdiendo el apoyo de los independientes, porque no existe una política definida e institucional desde La Moneda hacia esta bancada”.

Por lo mismo, el diputado Pedro Velásquez, agrega, que si bien es partidario que el gobierno “agote todas las instancias para buscar grandes acuerdos, cuando eso no ocurra, finalmente, puede tocar nuestra puerta y esta siempre estará abierta, porque no podemos colocarnos en una vereda absolutamente opositora”, dice.

En el encuentro los diputados le plantearon a los ministros las inquietudes que cada uno tiene por sus respectivos distritos. Marinovic e Isasi sacaron la voz por las regiones extremas, Araya por las zonas mineras, Sepúlveda por el tema agrícola, y Velásquez por la pronta licitación del puerto de Coquimbo.