Larraín dice que Presupuesto está orientado a clase media e insiste en que no es de crisis

El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, volvió a defender el proyecto de Presupuesto 2012 que ayer detalló en el marco de la presentación del Estado de la Hacienda pública en el Congreso.

En una entrevista a Radio Duna, la autoridad dijo que se trata de un Presupuesto orientado especialmente a la clase media y no sólo por los esfuerzos que están haciendo en materia de educación.

“Está completo la eliminación 7% de cotización de salud, está completo el postnatal, la extensión del postnatal, está también el bono bodas de oro. O sea, hay una cantidad de cosas que van a la clase media, más todo lo que estamos haciendo en materia de Educación”, dijo el secretario de Estado a Radio Duna.

Pese al adverso escenario internacional y a las señales más frecuentes de recesión, el jefe de la billetera fiscal reiteró que no se trata de un Presupuesto de crisis.

“Es un presupuesto hecho para un escenario de bastante desaceleración, pero no un escenario de crisis”, agregó Larraín.

Aunque el economista reconoció el empeoramiento de la situación internacional, también recordó que el gobierno está preparado para enfrentar un escenario más adverso con el plan de contingencia anunciado hace unas semanas y que contempla medidas de estímulo fiscal.

“El plan de contingencia va a contemplar un estímulo fiscal que probablemente va a ser adicional y detallaremos en su momento. Es como una póliza de seguros. Uno esperaría no usar el seguro, pero si es que ocurre vamos a usarlo y vamos a estar preparados. Por lo tanto, Chile tiene la posibilidad de responder, pero no estamos inmunes ni estamos blindados”, dijo Larraín.

Y aunque reiteró que un agravamiento de la situación externa de igual manera “nos va a afectar”, se mostró esperanzado en que el plan amortiguará el golpe.

“Esperamos poder minimizar los efectos especialmente en la clase media y sectores más vulnerables”, dijo.

Reforma tributaria

Respecto al tema tributario, Larraín aclaró que él no se opone a una reforma en esa materia, sino más bien que el debate le parecía inoportuno ad portas de la discusión por el Presupuesto que, más encima, no requiere de una modificación en la carga impositiva para su financiamiento.

“No era necesario el aumento de tributos para financiar el presupuesto 2012. Y así ocurrió. Nosotros ingresamos con la actual estructura tributaria y con los recursos que nos dan los ingresos estructurales que es la forma cómo se construye este presupuesto”, dijo.

Respecto a la polémica por el impuesto específico a los combustibles, el ministro dijo que el tema quedó definitivamente zanjado ayer en alusión a las declaraciones que realizó el titular de Economía, Pablo Longueira. De cualquier modo, defendió la mantención del tributo

"La gente que ha estudiado en términos serios este tema y con trabajos publicados, la verdad es que dicen que este es un impuesto progresivo", agregó.