El gerente general y country head de Banco Santander en Chile, Claudio Melandri, expresó su preocupación frente al creciente fenómeno del “compro cupo en dólares” de tarjetas de créditos, el cual “si bien para algunos abogados puede ser legal, para mí corresponde a un tipo de préstamos ilegales o usura encubierta”.
El ejecutivo lamentó que las normativas actuales no le permitan a los bancos actuar para contener este fenómeno, el que en la industria estiman preocupante por las tasas de crecimiento que ha tenido a medida que se deteriora el mercado laboral en el país.
Un ejemplo de inflexibilidad es la exigencia del consentimiento expreso para la modificación de contratos, lo que Melandri recuerda no existe en ninguna parte del mundo y que en este caso les impide consolidar los cupos en dólares en uno solo en pesos o reducir el monto. “Son millones de contratos y sería inviable corregir esta situación de manera efectiva y oportuna, cuando cada persona debe firmar el cambio”, dice.
Agregó que han tomado contacto con las marcas MasterCard y Visa, así como con Transbank para abordar este tema, gestiones que en todo caso están en fases iniciales.
Para el gerente de Santander Chile, esta situación es un ejemplo más de cómo malas regulaciones o reformas que avanzan en la dirección de las restricciones terminan creando problemas, como por ejemplo ha ocurrido con la “fijación de precios” en la Tasa Máxima Convencional, la que si bien comparte que debía ser perfeccionada, se hizo de tal manera que se ha traducido en una desbancarización de los segmentos de personas de mayor riesgo, los que han caído presa de financieras informales, que incluso llegan a tener decenas de sucursales, cobrando altas tasas de interés y sin ninguna protección para los clientes.
Melandri pidió una mejor sintonía fina en materia de regulaciones para el mercado financiero, estimando, por ejemplo, que a partir del caso Arcano es posible identificar correcciones que permitirían evitar problemas de ese tipo, lo cual, estimó, debe ir acompañado de una oportuna acción por parte de las autoridades.
A nivel del banco, que desvinculó a tres ejecutivos que mantenían inversiones en esa firma, Melandri dijo que el banco actuó con decisión teniendo a la vista el código de ética que los rige. “Los ejecutivos tienen que ser un ejemplo y si se transgrede el código de conducta no podemos no actuar, independiente de que los montos sean pequeños”, señaló.
Divergencia de diagnósticos
Melandri también se hizo cargo de los divergentes diagnósticos que se perciben respecto de Chile entre los agentes locales y extranjeros, como es la visión que tiene Santander España, que ve con optimismo la estabilidad macro, la solvencia institucional y el potencial efecto de las reformas, mientras en el país las encuestas muestran una sensación de desconfianza, pesimismo e incertidumbre.
Al respecto, Melandri compartió la visión de la presidenta de Santander, Ana Botín, sobre Chile en cuanto a que es natural que las cosas se vean peor dentro de los países versus a como se ven desde fuera. El ejecutivo subrayó que el diagnóstico que se hace desde la matriz enfatiza la solidez macro de Chile, un país que crece en un contexto de decrecimiento promedio en la región, que tiene baja inflación, no tiene problemas en su cuenta corriente y que suma décadas de instituciones que dan confianza, como un Banco Central autónomo.
“Eso es así. Ahora bien, es cierto que nos gustaría crecer más y no por debajo del potencial y que desde el punto de vista micro vemos que hay situaciones que no son del gusto de todos. Situaciones en que veo que la estamos embarrando. Cuando veo que nos olvidamos de la política de los consensos, me da rabia; cuando veo financiamiento ilegal de la política a costa de los impuestos de los chilenos me da rabia y lo mismo cuando veo colusión entre empresas que perjudica a los clientes”.
Y le da rabia, dice, porque “a mí me gusta hacer las cosas bien. Yo nací en Recoleta e iba a trabajar con bufanda y sin abrigo y estoy acá producto del esfuerzo. Por lo tanto, no tengo prejuicios y puedo decir sin problemas que necesitamos que a las empresas les vaya bien, que los trabajadores estén contentos y que los clientes estén contentos. Esas cosas no van separadas. No me vengan que todas las empresas y los empresarios son ladrones, porque eso no es así. No nos metan en el mismo saco. Estoy orgulloso de dirigir el mayor banco del país, con casi 12.000 trabajadores y que tiene muy buenas relaciones con sus trabajadores y sindicatos, que son un 70% de los trabajadores”, recalcó.
Y concluyó que es cierto que hay una responsabilidad de las empresas de emparejar la cancha en su relación con sus clientes, cuestión que se debe hacer con prioridad, pero sin golpear el crecimiento y el progreso de las personas.
Compromiso con la infraestructura
El gerente general de Santander Chile dijo que en línea con las prioridades estratégicas del Banco a nivel regional, la entidad reforzará su accionar en el ámbito de la infraestructura, en donde en los últimos años han estado presentes en las grandes obras en el país, lo que incluye carreteras, hospitales, infraestructura eléctrica, y el puente sobre el Canal del Chacao.
El negocio de las empresas que compran cupo en dólares
Si algo buscan muchos de los que están pasando por problemas financieros es dinero fácil y, principalmente, rápido. Según la banca, ya son varios los que han ido en busca de empresas que ofrecen comprar el cupo de dólares de las tarjetas de crédito para obtenerlo.
¿Cómo es el negocio de quienes ofrecen este servicio? Su operación se realiza de dos formas: una, a través de sitios de compras por Internet, realizando un pago con el plástico a una cuenta determinada, tras lo cual aseguran que el dinero es depositado en la cuenta del cliente. La otra, también haciendo uso de estas páginas web, aunque de manera presencial, donde el dinero es entregado en efectivo. La "comisión" que se cobra es generalmente el 30% del monto, lo que se suma a los cargos que realiza el banco por el uso de dicho cupo, además de los seguros asociados y otros costos, por lo que terminará pagando un interés de hasta 60%. Es decir, si recibió $ 1 millón, deberá desembolsar $ 1,6 millones, y de una sola vez, ya que no se puede pagar en cuotas cuando se usa el cupo internacional.
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