Gobierno califica a Central Castilla como “molesta” y la deja ad portas de aprobación

D. Paleo / A. Pozo


Mañana se podría reactivar la tramitación de la Central Castilla, proyecto temoeléctrico impulsado por la empresa MPX Energía del brasileño Eike Batista.

Esto, después que el seremi de Salud de la Región de Atacama, Nicolás Baeza, calificara como “molesta” la central, en contraposición con la calificación de “contaminante”, consignada por la seremi de Salud durante el gobierno de Bachelet, Pilar Merino.

Ayer, en un paso fundamental con miras a la aprobación del proyecto termoeléctrico -que implica una inversión de US$ 4.400 millones y que inyectará 2.354 MW al Sistema Interconectado Central (SIC)- el seremi comenzó a notificar a las partes interesadas del proyecto a través de una breve carta.

“En razón de lo resuelto procedentemente, califíquese para efecto del permiso ambiental sectorial establecido en el artículo 94 del reglamento del SEA, la actividad industrial del proyecto central termoeléctrica Castilla como molesta”, decía el escrito. 
Durante la tarde, además, la intendenta Ximena Matas, quien preside la Comisión de Evaluación Ambiental, citó a los integrantes del organismo, compuestos por los seremis de distintas reparticiones. La cita donde se reactivará la tramitación del proyecto será mañana temprano.



Silencio administrativo


Una vez que se quite la suspensión, el plazo legal que resta para votar el proyecto es de un día. Si la Comisión de Evaluación Ambiental no se pronuncia, podría aplicarse el silencio administrativo y Central Castilla sería aprobado tal como ingresó al sistema.

Sin embargo, esta opción -explican cercanos al proceso ambiental-, aunque probable, se buscará evitar. 
Según dicen, tras el fallo de la Corte Suprema, que cuestionó la forma como el ex seremi de Salud Raúl Martínez había hecho el cambio de la calificación a mediados de 2010, permitiría que el plazo legal de la tramitación se amplíe, al retornar al punto donde la ex seremi de Salud del gobierno de Bachelet la calificó como contaminante, ganando algunos días.

De todos modos, la Comisión de Evaluación deberá votar el proyecto en los próximos días.



Opositores


Conocida la resolución -que debería ser explicada hoy a través de una conferencia de prensa del seremi de Salud-, la intendenta Ximena Matas se reunió con un grupo de opositores al proyecto, quienes le manifestaron su molestia por el cambio de catalogación y anunciaron que analizarán posibles acciones.

Además, durante el fin de semana pasado se conoció que la familia Domínguez, una de las opositoras al proyecto, había llegado a un acuerdo con representantes de la empresa.

Con esto, el complejo escenario que enfrentaba el proyecto mejoró sustancialmente. La familia aceptaba no tomar acciones legales. La empresa, por su parte, aportaba recursos para una fundación y se sometía a una auditoría para evaluar sus emisiones.