Mayor relevancia de Chile y países emergentes en la OCDE
En mayo de cada año, ministros representantes de los países miembros de la OCDE...
En mayo de cada año, ministros representantes de los países miembros de la OCDE se reúnen para acordar las líneas de trabajo y estrategia de la organización para los próximos años.
El tema principal de este año apunta a los cambios en la economía global y su impacto sobre la OCDE. Esta reunión, la primera después del cincuentenario del organismo, será presidida por Turquía, con Chile y Polonia en las vicepresidencias. Ello implica que ningún miembro del G-8 estará en la mesa directiva de la Ministerial. Esto, sumado al contenido sustantivo de la reunión, demuestra el peso creciente de las economías emergentes en el escenario global.
En el caso de Chile, reviste especial significancia el hecho que nuestro ministro de Hacienda, Felipe Larraín, sea vicepresidente de esa Reunión Ministerial, encabezando las sesiones sobre la nueva Estrategia sobre el Desarrollo de la OCDE y sobre empleo y competencias.
Chile es el primero de los nuevos miembros en tener la oportunidad de participar a un alto nivel en la definición de los temas de la reunión, trabajar en el informe de los ministros e influir en las líneas de trabajo futuro que se adoptarán. Todo ello a dos años de haber ingresado a la organización. Esto constituye un reconocimiento a la consistencia de las políticas económicas adoptadas por Chile en las últimas décadas y muestra que pese a su tamaño relativamente pequeño, los miembros de la OCDE valoran la visión que tiene Chile sobre los desafíos globales y el aporte que puede hacer a su solución, así como su papel como articulador de las relaciones de ese organismo con América Latina.
La Estrategia sobre el Desarrollo de la OCDE tiene como propósito incrementar la relación de trabajo con las economías emergentes, examinando las experiencias de estas economías y extrayendo las lecciones de buenas prácticas de políticas públicas que han llevado a estas economías a ser las de mayor crecimiento en medio de la crisis. La OCDE aplicará en esta estrategia la misma metodología de trabajo que ha aplicado en sus primeros 50 años. Esto es, análisis basado en la evidencia y revisiones de pares. Esta estrategia guiará el trabajo en materia de desarrollo y ratifica el compromiso de la organización con el progreso global.
La Ministerial también abordará otros tres temas de fondo. Primero, cómo enfrentar las presiones proteccionistas a las que está siendo sometido el sistema multilateral de comercio y las nuevas oportunidades de beneficios que provienen del surgimiento de las cadenas de valor globales. Segundo, la importancia de adoptar políticas que permitan mejores oportunidades de educación, empleo y emprendimiento para las mujeres. Tercero, el desafío de tener un sistema de capacitación que asegure que la oferta de competencias coincida con la demanda para asegurar empleabilidad. En una economía global crecientemente basada en el conocimiento, las competencias de los trabajadores son un elemento clave para que el progreso tecnológico se traduzca en incrementos en productividad.
En definitiva, una Ministerial en que Chile tendrá un activo papel como conductor de las temáticas donde intervendrán tanto ministros de miembros de la OCDE como de países invitados, abriendo así los segundos 50 años de esta organización.