Es el único huésped de la administración anterior que llegó y se fue con Sebastián Piñera de La Moneda. El ex ministro de la Secretaría General de la Presidencia (Segpres), Cristián Larroulet, sobrevivió a los cambios que realizó el ex mandatario y a las críticas que se le hacían desde su propio sector por una de sus más relevantes características: buscar acuerdos con la oposición de la época para aprobar muchos de los proyectos presentados por su gobierno, algo que él mismo recuerda.
Por lo mismo es que le preocupa que ese clima que se inició con la Concertación haya pasado al olvido con el actual gobierno. En esta entrevista con DF, rechaza con firmeza los “ataques” a Piñera e insta a los dirigentes “serios” concertacionistas a no sumarse a ellos.
- ¿Cómo percibe el clima económico y político?
- Veo con mucha preocupación el clima económico y político del país desde la llegada de la Nueva Mayoría al gobierno, porque se rompió, con la política de retroexcavadora, lo que había sido el acuerdo político de Chile a partir del retorno a la democracia. La importancia de crecer, de hacer políticas sociales de largo plazo, habían logrado un gran consenso nacional y eso lo rompe la Nueva Mayoría. Y hoy, a pocos meses de la elección, estamos viendo los resultados de ese proceso.
- ¿Cuáles?
- Piense que este año 2017 la economía chilena va a crecer de nuevo menos de 2%; y vamos a tener una tasa de desempleo -la última cifra es 6,2%- en torno a 7%, incluso pueden ser mayor.
Entonces, estamos viviendo un clima de crispación que tiene su origen en la falta de crecimiento y oportunidades. A esto se agrega un clima de discusión política que no ayuda a recuperar las confianzas.
- ¿A qué se debe esto?
- Esto es producto de que el gobierno se sigue manteniendo sin priorizar la agenda económica de crecimiento. Cuando la gente quiere más empleo, mejor salud, menor delincuencia, no se está priorizando este espíritu de acuerdo para progresar.
- ¿Cómo favorece este mal clima a Sebastián Piñera?
- No hay duda de que hoy los chilenos están viendo con mucho mayor claridad el buen gobierno que hizo el presidente Sebastián Piñera.
- ¿En contraste?
- Exactamente. Porque cuando se ve un gobierno en que los empleos asalariados han disminuido versus un gobierno que creó un millón de empleos; cuando se ve que los salarios están creciendo a la mitad de lo que crecieron en el gobierno del presidente Piñera; cuando se ve que el clima no es el mismo que había -como no teníamos mayoría, tuvimos que hacer prácticamente todas las leyes con acuerdos-; entonces, la gente está reconociendo ese buen gobierno que hizo Sebastián Piñera y, por eso, está teniendo el mayoritario soporte que se ve en las encuestas.
- Sin embargo, hay un debate por los conflictos de interés.
- Eso tiene una explicación política y es que la Nueva Mayoría, sobre todo los sectores más extremos, ya se ha dado cuenta de que es inevitable el triunfo de Sebastián Piñera. Primero tuvieron la ilusión de que fuera Lagos, pero Lagos no prendió y surgió Guillier, entonces hacia fines del año pasado hubo una expectativa grande sobre él; pero eso se acabó en enero.
- ¿Así lo interpreta?
- Si se fija en las encuestas, a raíz de los incendios Guillier desapareció, no hizo nada; Piñera fue activo y la gente empezó a recordar la reconstrucción del terremoto del 27/F, el episodio de los mineros y empezó a ver la actitud distinta de un presidente versus otro. ¿Y qué ha pasado en las últimas cuatro semanas? la diferencia a favor de Piñera frente a Guiller se ha expandido.
Entonces, los sectores más duros de la Nueva Mayoría se han dado cuenta que el camino democrático no está dando frutos y ahora están haciendo uso del Poder Judicial con el intento, a través de mentiras, de atacar el triunfo de Sebastián Piñera. O sea, primero era la etapa democrática con los candidatos y eso no ha dado resultado. Tanto no ha dado resultado que si la elección es este domingo, Sebastián Piñera gana por más distancia de la que ganó en 2010. Y, por lo tanto, es un instrumento político, a mi juicio abusando del Poder Judicial y de una manera inmoral, impedir el triunfo de Sebastián Piñera.
El llamado a la Concertación
- Entonces, ¿comparte la reacción de Piñera?
- Total, es una maniobra política total y están todos los antecedentes para respaldar eso. Por eso, me parece que es una actitud no democrática. Más aún estoy seguro que las personas clave de la Concertación, estoy pensando en un Patricio Aylwin y en un Edgardo Boeninger, estarían rechazando la actitud del diputado Gutiérrez específicamente, porque esa no es la manera de construir un país.
Se está haciendo abuso de un Poder del Estado, como el Poder Judicial, con mentiras para tratar de derrotar por una vía no democrática a quien lleva la delantera.
Por eso, hago un llamado a todas las personas que han estado en la Concertación, los dirigentes serios, que no se sumen a este estilo de la política, que es muy malo para el país.
- ¿No contribuye Piñera al mal clima con declaraciones como aquella en que dice que en la NM necesitan permanecer en el gobierno para mantener las pegas?
- No, porque él se refería a la personas que están detrás de estos ataques que son completamente injustos. También hay que comprender a una persona que están atacando a su familia, a sus hijos, a su señora, con malas artes. Porque, vamos al fondo de las acusaciones, jurídicamente no corresponden, no se cumplen los requisitos mínimos de la formalidad de una querella, dijo Loreto Silva sobre la ampliación de la querella. Pero tampoco se cumplen los requisitos de la mínima racionalidad económica, porque en las dos querellas señalan que se habría hecho uso del poder para un beneficio económico, el cual no existe.
En el caso de Exalmar, si al comienzo la acción valía 100, ahora vale 25; es decir, ¿hizo todo para perder el 75% de la inversión? Piense en Dominga, es mineral de hierro y se dice que se suspendió Barrancones para beneficiar Dominga y la incidencia de la energía en una empresa minera de hierro es 40% de los costos, o sea, hizo todo esto para perder plata. Entonces, hay un mínimo de rigor analítico que el Poder Judicial también tiene que hacer.
- ¿No se ha hecho?
- Voy a hacer un comentario personal: soy la única persona que trabajó con Piñera los cuatros años en La Moneda, nunca, nunca -y hablábamos todos los días-, nunca Piñera me habló de algo que no sea de los intereses del país. Siempre de temas de política pública. Si hay algo que vi en los cuatro años fue su total dedicación, compromiso agotador con los temas del país.
- El mismo Harald Beyer dijo que Piñera no ha terminado de cerrar bien el tema de los conflcitos de interés.
- Esperemos que anuncie su candidatura y los anuncios complementarios que va a hacer en esos días.
- ¿No le preocupa generar demasiada expectativa que no se pueda cumplir?
- Nosotros estamos conscientes que el gobierno de Piñera no fue perfecto y tenemos muchas cosas que se van a mejorar. Recojo eso, tal vez no podemos ser tan optimistas como fuimos antes, pero porque la realidad del país se ha deteriorado enormemente.
- ¿Podría afectarlo electoralmente sacar a colación su éxito empresarial para defenderse de las críticas?
- No para nada. Hoy por contraste, el ciudadado chileno se da cuenta de la importancia del crecmiento económico y está valorando cada vez más un entorno que favorezca el crecimiento de las empresas.
Mandato presidencial: "cuatro años con reelección"
- ¿En su opinión hay algo bien hecho en las reformas que usted no cambiaría?
- En el caso de educación, a pesar de que no es perfecto, se ha avanzado en manetria de profesores. Los profesores son muy importantes para mejorar la calidad de la educación. En materia tributaria hay cosas como el 14 Pyme, que es un instrumento tributario que me parece interesante, bueno, que se puede extender. Hay cosas, por supuesto.
- ¿Habría que bajar el impuesto a las empresas?
- Creo que sí. Hoy tenemos una tasa que es mayor que el promedio de la OCDE y somos uno de los cinco países que tiene mayor carga tributaria en las empresas, siendo uno de los tres países más pobres.
- ¿Haría algo en materia constitucional?
- También hay cosas que hacer. Por ejemplo, en lo político soy partidario de que haya derecho, por una sola vez, a la reelección inmediata del presidente de la República. En lo económico, soy partidario de colocar el principio de la responsabilidad fiscal y del balance estructural, y de las instituciones que lo aseguren, en la Constitución. Parte importante de los cambios constitucionales que ha habido en los países desarrollados se refieren precisamente a esto.
- ¿No será mejor volver a los seis años?, como ya plantean algunos.
- Yo soy muy partidario del período de cuatro años y el mejor ejemplo es que bueno que haya cuatro años, cuando hay un mal gobierno como éste. Por eso, es que soy partidario de los cuatro años con reelección por una sola vez.
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