Contrario a lo que era el plan original, derivado de la suspensión del proyecto Pascua-Lama anunciada a fines de octubre, la canadiense Barrick reducirá el plan de desvinculación de trabajadores en el lado argentino del proyecto binacional.
Así al menos se lo comunicó el co-presidente de la compañía, John Thornton, al vicegobernador de San Juan, Sergio Uñac, en la reunión que sostuvieron hace unos días.
De esta forma, Barrick mantendrá en la plantilla a 3.500 trabajadores, todos ellos de la provincia de San Juan, donde se ubica la iniciativa, mientras que serán desvinculadas sólo 1.500 personas, extranjeros o provenientes de otras zonas de Argentina.
Según la autoridad trasandina, los trabajadores serán destinados en fases a realizar labores que fundamentalmente incluyen movimiento e impermeabilización de suelos, obras de manejo de agua, mantenimiento de infraestructura general y monitoreos ambientales.
Medios argentinos indicaron que los ejecutivos le habrían planteado a Uñac que este compromiso se mantendría hasta abril. Otras publicaciones indicaron que las negociaciones sostenidas en la última semana entre la compañía y el gobierno provincial fueron monitoreadas por el secretario de Minería de la Nación, Jorge Mayoral, quien hace algunas semanas declaró que el entorpecimiento por parte de las autoridades chilenas más que los problemas económicos declarados por la compañía explicaban la suspensión transitoria de este proyecto que busca extraer oro y cobre.
Este anuncio supone un cambio respecto de lo informado por Barrick a fines de octubre cuando precisaron que a raíz de la paralización de la construcción de Pascua en Chile, por motivos regulatorios, los cambios en las condiciones de precios de los metales y el aumento de costo de los proyectos, debían reducir el ritmo de las obras en Argentina, donde los trabajos seguían avanzando. Lo anterior, dijeron conocedores del tema implicaría reducir drásticamente la plantilla del proyecto en ese país, posibilidad que despertó la preocupación de las autoridades trasandinas que temieron el impacto de esta decisión en la economía local.
En este sentido, el vicegobernador de San Juan añadió que en la reunión los ejecutivos de la minera canadiense se comprometieron a realizar el próximo año inversiones por US$ 450 millones, monto que distribuirán entre los dos proyectos que tienen en la zona: Lama y Veladero, este último ubicado más al sur, a la altura de la Región de Coquimbo.
A ello se suma que plantearon el compromiso de pagar a los proveedores de la provincia deudas por un total de US$ 200 millones.
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