Estados Unidos golpeó la mesa del comercio global hoy, al anunciar que aplicará aranceles a la importación de acero y aluminio provenientes de México, Canadá y la Unión Europea.
El secretario del Comercio, Wilbur Ross, anunció que Washington permitirá la expiración de las exenciones a dichos países en los cobros impuestos este año, lo cual se concretará mañana. Con ello, se aplicará aranceles de 25% al acero y 10% al aluminio proveniente de los mayores socios comerciales de EEUU.
La decisión muestra la pérdida de paciencia de la Casa Blanca frente a los diálogos con México y Canadá, que integran el Acuerdo de Libre Comercio de América del Norte (Nafta, su sigla en inglés) y con la UE.
También abre el escenario a una guerra comercial global. Esta mañana, antes del anuncio de Ross, el ministro de Hacienda de Francia, Bruno Le Maire, había advertido que la UE no tendría más opción que "involucrarse en una guerra comercial" contra EEUU si se imponían nuevos cobros.
"Depende completamente de las autoridades estadounidenses si quieren entrar en un conflicto comercial con su mayor socio, que es Europa", manifestó la autoridad. Le Maire llamó a Trump a revertir "aranceles injustificados, injustificables y peligrosos", y advirtió que la UE tomaría "todas las medidas necesarias".
Más tarde fue el propio presidente francés, Emmanuel Macron, quien calificó como "ilegal" la decisión, y adelantó que esta misma noche hablará con su homólogo estadounidense. Según la cadena "BMFTV", el mandatario galo lamentó la aplicación inmediata de esta medida, que considera "un error".
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores, Jean-Yves Le Drian, también deploró una decisión "inaceptable", a la vez que advirtió que "tomaremos medidas proporcionadas de tasación con Estados Unidos".
En Alemania, el ministro de Economía Peter Altmaier dijo que el país "no dejará piedra sin voltear" para evitar las tarifas y enfatizó la necesidad de una respuesta unida en la UE.
La propia canciller Angela Merkel manifestó que el bloque dará una respuesta "inteligente, decidida y acordada en conjunto" a las acciones de Washington que, agregó, romperían las reglas de la Organización Mundial del Comercio.
Por su parte, el Ministerio de Economía mexicano anunció que responderá con cobros a la importación de acero, lámparas, carne de cerdo y otros productos agrícolas. El país reiteró su rechazo a las "medidas proteccionistas", insistiendo en que perjudican el comercio global.
El anuncio de la Casa Blanca llega en momentos en que sube la tensión entre EEUU y China, quienes también negocian para evitar una guerra arancelaria.
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