La Procuraduría (Ministerio Público) de Colombia destituyó e inhabilitó por 12 años al superintendente financiero, Gerardo Alfredo Hernández, por la supuesta desatención de su función de control frente a las operaciones de la comisionista InterBolsa, que derivaron en el mayor escándalo bursátil del país.
El procurador general, Alejandro Ordóñez, encargado de impartir las sanciones disciplinarias a los funcionarios colombianos, dictó en una rueda de prensa la misma medida contra otros trabajadores de la Superintendencia, Diego Mauricio Herrera Falla y Rosita Esther Barrios Figueroa.
La Procuraduría consideró un hecho que "la comisionista InterBolsa ejecutó una actividad insegura, ilegal o no autorizada, con ocasión en el riesgo de contraparte asumido por su participación en un negocio que desarrolló en cuenta propia y cuyo riesgo fue transmitido a sus clientes".
Y señaló que el superintendente no tomó acciones preventivas entre 2011 y 2012 para proteger a los inversionistas pese a haber conocido la manipulación en el precio de las acciones de la empresa Fabricato.
"No fue si no mucho tiempo después que se tomaron las acciones frente a este caso que ya eran de conocimiento general", agregó el procurador en alusión a la Superintendencia Financiera.
Esta decisión del procurador Ordóñez, quien habitualmente suele discrepar con el Gobierno del presidente Juan Manuel Santos, desató una reacción de rechazo en el Ejecutivo, que respalda abiertamente a Hernández.
"La decisión que tomó la Procuraduría en contra del Superintendente Financiero a raíz de lo que ha venido sucediendo con Interbolsa, por supuesto que el Gobierno acata esa decisión del Procurador, pero en este caso no la compartimos", afirmó Santos.
El jefe de Estado describió a Hernández como "una persona transparente y dedicada a su trabajo" y como la "mejor capacitada del país para hacer lo que está haciendo", al tiempo que apostó por el trabajo correcto del superintendente.
"Yo espero que el doctor Gerardo Hernández interponga un recurso, que le ofrece el procedimiento de la ley, ante el propio procurador y que, en el entretanto, no solo ante la Procuraduría sino ante el país entero, pueda explicar en detalle el procedimiento que utilizó frente a este tema de Interbolsa", agregó Santos.
También el ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas, expresó su respaldo hacia Hernández en un comunicado, en el que le definió como "un servidor público intachable" que ha sido Secretario de la Junta Directiva y Gerente Ejecutivo del Banco de la República y Superintendente Financiero desde 2010.
"El Gobierno Nacional reitera que la decisión que cobija al Superintendente Financiero se basa en la diferencia de criterio sobre la interpretación del ejercicio de las funciones de supervisión por parte de la Superintendencia Financiera de Colombia", anotó el ministro Cárdenas.
Además, indicó que aunque "respeta y acata el fallo en primera instancia de la Procuraduría General de la Nación", el Gobierno mantendrá en el cargo al superintendente financiero hasta que se adopte una decisión final ante un eventual recurso.
El declive de InterBolsa S.A. se explica desde el descalabro de uno de sus principales activos y empresas subordinadas, la comisionista InterBolsa, que entró en una crisis de liquidez por una serie de maniobras desarrolladas por los principales accionistas, actualmente en investigación.
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