Dos mujeres se enfrentan este fin de semana en la “batalla por París”

Francia celebra este domingo elecciones municipales en todo el país, pero todos los ojos estarán atentos al resultado de la contienda por París, la madre de todas las batallas, ya que este bastión tradicionalmente ha servido para catapultar la carrera de los políticos en ascenso.

Y la contienda este año está marcada por la confrontación entre dos mujeres con perfiles muy contrapuestos. Por una parte está Anne Hidalgo, la socialista hija de inmigrantes españoles de la clase trabajadora. A ella se enfrenta Nathalie Kosciusko-Morizet, conocida como NKM, una joven conservadora con raíces aristócraticas y que no ha ocultado su ambición por llegar a la presidencia.

Hidalgo tiene a su favor el haber trabajado durante trece años como vice alcalde del saliente Bertrand Delanoe. Un triunfo de ella extendería el predominio de su partido en la capital, a pesar de la baja popularidad del presidente François Hollande, también socialista.

Por otro lado, NKM, ex ministra de Medio Ambiente en el gobierno de Nicolas Sarkozy, había sido considerada en un principio como una clara ganadora, pero su campaña se ha visto perjudicada por candidatos conservadores disidentes en algunos distritos de la ciudad que seguramente le costarán varios votos.




Sus propuestas


Es probable que Hidalgo se beneficie de proyectos exitosos desarrollados por Delanoe, como la creación de una playa en verano en las orillas del río Sena. Ahora, la candidata pretende transformar la elegante avenida Foch en la mayor avenida peatonal de la ciudad. Por su parte, NKM quiere que más tiendas estén abiertas los domingos, especialmente en zonas turísticas, lo que podría encontrar oposición de los sindicatos.

¿Cuáles son sus puntos débiles? A Hidalgo la acusan de carecer del carisma de Delanoe, y a NKM de ser demasiado elegante como para entender la realidad del día a día.

Las encuestas han arrojado que la elección será muy ajustada, tanto que los expertos apuestan a que Hidalgo ganará, pero en una segunda vuelta el domingo 30.

El ultra derechista Frente Nacional podría dar un importante golpe en estos comicios, adjudicándose varios municipios en todo el país, beneficiándose de la fuerte caída en la popularidad del presidente socialista François Hollande.

"El Frente Nacional es menos repulsivo (para los electores) de lo que era en los últimos años", dijo a Reuters el analista Jean-Daniel Levy de la encuestadora Harris Interactive.

"Los votantes actualmente no están buscando al candidato más competente, sino que al que comparta sus sentimientos sobre el estado de la sociedad francesa", señaló el experto político galo.