Japón sorprende con sólido crecimiento trimestral impulsado por consumidores

El crecimiento de la economía japonesa se incrementó en el tercer trimestre 3,9% anual, tras una expansión revisada de 1,8% en el trimestre anterior, gracias al impulso dado por los incentivos gubernamentales lanzados antes de que la desaceleración amenace la economía nipona. Economistas consultados por Bloomberg esperaban un incremento de 2,5%.

El consumo, que representa cerca del 60% del PIB, lideró el alza, principalmente gracias a que los hogares aumentaron las compras de automóviles de bajo consumo de combustibles y a que los fumadores se abastecieron de cigarros antes de que se elevara el impuesto al tabaco el 1 de octubre.

El gobierno del primer ministro Naoto Kan aprobó en octubre un paquete de estímulo de 5,1 billones (millones de millones) de yenes 
(US$ 61 billones) y extendió el programa de incentivos para comprar electrodomésticos de ahorro de energía hasta marzo.

Sin embargo, el gobierno no tuvo una posición optimista ante estas cifras. El ministro de Economía, Banri Kaieda, advirtió de que la desaceleración del crecimiento en el extranjero y el yen, que alcanzó ayer su máximo en 15 años, podrían amenazar el panorama.

“La economía de Japón está en un punto muerto, con debilidad en la producción”, manifestó Kaieda en un comunicado emitido tras conocerse los datos.

“El crecimiento del tercer trimestre dependió mucho de la demanda doméstica, y esto sugiere una marcada desaceleración en el trimestre final a medida que el consumo impulsado por los estímulos pierden fuerza y se frena el crecimiento de las exportaciones”, comentó a Reuters el economista jefe de RBS Securities, Junko Nishioka.




Recorte de ganancias


La apreciación del yen también ha provocado que firmas japonesas recorten sus proyecciones. La fabricante de cámaras fotográficas Nikon redujo sus proyecciones anuales de ganancias operacionales e ingresos. En tanto la compañía electrónica Sharp también recortó sus estimaciones de utilidades anuales en 40%.

Los reportes gubernamentales de octubre mostraron que la producción industrial cayó a más del doble del ritmo que pronosticaron los economistas en septiembre y las exportaciones se incrementaron menos que el año pasado. El banco central también rebajó su evaluación este mes, describiendo la expansión económica como “en pausa”.

Incluso con esta tasa de crecimiento, el PIB de Japón de US$ 1,3 billón (millón de millones) quedó detrás del de China de US$ 1,4 billón, lo que convierte a este trimestre en el segundo consecutivo en el que la producción nipona es menor a la china. No obstante, Japón sigue siendo la segunda mayor economía del mundo en el período entre enero y septiembre.