Economía
Obama decide retirar a Cuba de lista negra del terrorismo
La decisión llega tres días después de la reunión entre los mandatarios de ambos países en Panamá. Cuba forma parte de la lista desde 1982.
Por: Diario Financiero | Publicado: Miércoles 15 de abril de 2015 a las 04:00 hrs.
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El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, informó ayer al Congreso que decidió retirar a Cuba de la lista de Estados patrocinadores del terrorismo, en la que el país permanece desde 1982 y que implica la imposición de sanciones por parte de Washington.
"Hoy el presidente envió al Congreso el informe y las certificaciones requeridas que indican la intención de la Administración de cancelar la designación de Cuba como Estado patrocinador del terrorismo", dijo el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, en un comunicado.
En el texto, la Casa Blanca explicó que planeaba sacar a Cuba de la lista ya que el país no había colaborado con el terrorismo internacional en los últimos seis meses y ha dado las suficientes garantías de que no lo apoyará en el futuro.
"Después de una cuidadosa revisión de la trayectoria de Cuba, así como garantías ofrecidas por el gobierno cubano, la Secretaría de Estado concluyó que Cuba cumple las condiciones para la remisión de su designación como un Estado patrocinador del terrorismo", dijo la Casa Blanca.
Reunión histórica
La decisión de Obama se produce tres días después de la Cumbre de las Américas en Panamá, donde el mandatario estadounidense dialogó el sábado con el presidente Raúl Castro en la primera reunión de esa naturaleza entre líderes de EEUU y Cuba en casi 60 años.
El gobierno comunista de Cuba ha exigido su retirada de la lista negra de Washington, elaborada anualmente por el Departamento de Estado, para avanzar en los esfuerzos para normalizar las relaciones entre los dos ex enemigos de la Guerra Fría.
Obama ordenó una revisión de la presencia de Cuba en la lista tras el anuncio que hizo junto a Castro el 17 de diciembre para iniciar un proceso para relanzar los vínculos bilaterales.
El Congreso tiene 45 días para estudiar la decisión del presidente y, en caso de desacuerdo, puede presentar un proyecto de ley para tratar de revocar el dictamen presidencial.
"Continuaremos teniendo diferencias con el gobierno de Cuba, pero nuestras preocupaciones sobre un amplio rango de políticas y acciones de Cuba caen fuera del criterio de si es relevante rescindir la designación de Cuba como un Estado que patrocina el terrorismo", agregó la Casa Blanca.
