¿Nos gusta pagar impuestos?

Antonio Faúndez, académico Escuela de Comercio, U. Católica de Valparaíso

Cada vez que doy inicio a una asignatura lo primero que pregunto a mis estudiantes es: ¿a quién le gusta pagar impuestos? En promedio, las respuestas afirmativas nunca exceden del 5% de un universo de 40 alumnos; los demás manifiestan una risa con cierto grado de ironía, invocando frases como "para qué voy a pagar impuestos si vemos que los niveles de corrupción aumentan" y citan casos como "Penta", "Milicogate", "Pacogate", entre otros.

Si bien, mi encuesta estudiantil –casi por entretención– no puede ser considerada para una investigación, ésta no se aleja de ciertos datos que voy a dar a conocer.

Destacados investigadores a comienzo de los años setenta guiaron sus estudios buscando responder la pregunta: ¿por qué los contribuyentes evaden? Enfoque que mereció ciertas críticas al no recoger todas las motivaciones de una persona para dar cumplimiento al pago de sus impuestos. Actualmente, los trabajos de investigación han desarrollado la interrogante en forma afirmativa, es decir, ¿por qué las personas cumplen con el pago de sus impuestos? Esto permite identificar aquellos factores que contribuyen al cumplimiento tributario de manera de replicarlos para aquellas personas que no cumplen. Así, determinar las motivaciones que tiene una persona para cumplir con el pago de los impuestos se conoce con el nombre de "moral tributaria".

El último estudio encomendado por el Servicio de Impuestos Internos (SII) sobre percepción social del sistema impositivo y la administración tributaria fue en el año 2007, en donde frente a la pregunta ¿ha tenido alguna vez la sensación de sentirse desmotivado para cumplir con el pago de sus impuestos?, curiosamente, las personas -de un universo de 2.757 entrevistados- el 51% de ellas respondieron nunca haber sentido esa desmotivación; un 23% pocas veces; un 15% varias veces y solamente un 7% se siente desmotivado en pagar sus impuestos. Sin embargo, desde el año 2007 a la fecha gran cantidad de agua ha corrido bajo el puente.

Si se analiza el índice de percepción de corrupción internacional (elaborado por Transparency International), en el año 2012 Chile se encontraba en la posición Nº21 dentro de los países menos corruptos de un total de 175, bajando al lugar Nº27 para el año 2018. Es decir, el índice de corrupción ha aumentado.

Si bien los autores están de acuerdo en la multiplicidad de factores que inciden en la motivación de los contribuyentes en el pago de sus impuestos (como la edad, sexo, nivel de educación, estado civil, estado de empleo o religiosidad), la corrupción es un factor clave a considerar frente al cumplimiento tributario. El suizo Benno Torgler determinó un patrón común en América Latina: esto es, que cuando las personas conocían o habían escuchado acerca de evasión fiscal, parecían tener una moral tributaria más baja que los demás.

Pero no todo es negativo, últimamente el SII ha obtenido buenos resultados en la encuesta de satisfacción de usuarios, lo que también es un factor que contribuye al cumplimiento tributario.

Aunque mi preocupación se sigue manteniendo: ¿nos gusta pagar impuestos? ¿Llegará el momento en que como ciudadanos tengamos el orgullo de contribuir con el pago de tributos? Esta es una respuesta que interesa a la política tributaria y que vale la pena reflexionar considerando los últimos episodios de corrupción en nuestro país.