Atractivo para la inversión extranjera

El último informe mundial de Inversiones de la Unctad constató que entre 2012 y 2013 Chile salió del selecto grupo de las 10 economías con mayor atracción de inversión extranjera directa (IED), al pasar de la décima posición hace dos años al puesto 17 el año pasado. Lo anterior, se explica en el informe, fue consecuencia de una baja de 29% en las corrientes de inversión, hasta los US$ 20.000 millones, producto de una importante disminución en el sector minero.

La información tiene como dato de contexto que el mismo reporte registra que el año pasado las corrientes de IED hacia América Latina y el Caribe avanzaron un 6% hasta totalizar 
US$ 182.000 millones, en donde las cifras desagregadas confirman un potente crecimiento de 64% de la inversión hacia América Central y el Caribe (hasta US$ 49.000 millones) y una baja de 6% en América del Sur (US$ 133.000 millones).

Respecto del año en curso, se estima que los flujos podrían mantener tasas de variación en niveles similares a los observados, gracias a la baja base de comparación.

Los datos consignados, que podrían estar influidos por cuestiones circunstanciales como la contabilización de grandes montos de proyectos específicos en un momento determinado, confirman algo bien sabido, como que los capitales son por esencia móviles y que entre los “mercados” de destino hay competencia para atraerlos. Chile, gran polo de atracción de IED por su madurez institucional, clima de negocios y nivel del capital humano, tiene ventajas y retos, que instan a no bajar la guardia y asumir que ya sea por competencia internacional o señales adversas esos flujos se pueden debilitar más allá de lo previsto.