A cinco días de que el PPD proclame al senador Alejandro Guillier como su candidato presidencial -sumándose a lo que ya hizo el PR, PS, y PC-, el presidente de la colectividad, Gonzalo Navarrete, analiza los desafíos de la campaña, partiendo por el principal, que es recolectar las firmas de independientes para inscribir la candidatura del legislador y donde los partidos jugarán un rol central.
El dirigente también admite que en materia de “contenidos más específicos, de cuál es el sentido de la campaña y el candidato, tenemos que acercarnos más, porque tenemos diferencias en torno a lo que ha sido el proceso actual”.
- ¿Cuáles son esas diferencias?
- Diría que es cómo manejar la idea de lo independiente y su relación con los partidos. Una de las cosas que no parece razonable es que una nueva coalición no tenga un rol activo de los partidos en una gobernanza. Parte de los problemas que tuvimos en este gobierno fue que la relación entre el rol de la Presidenta y los partidos se fue diluyendo, posterior al caso Caval es mucho más fuerte. Pero antes tampoco los partidos teníamos la sensación de un proyecto común, suficientemente consolidado y que los matices que planteaba la DC eran poco más que un matiz.
En el caso de Guillier, esta separación con los partidos es buena desde el punto de vista de la imagen pública, pero para gobernar necesita una sintonía fina con ellos en un proceso que va a incluir transformaciones y las personas que ingresen al gobierno tienen que tener un compromiso político, programático y de trabajo. Ese sentido, hay que instalar en Guillier una convicción de que esto requiere partidos, mando, coalición y no un conjunto de ideas genéricas que después no tiene capacidad de expresarse.
- ¿Y cómo se concilia eso con la necesidad de Guillier de mantener su independencia?
- La decisión de buscar firmas ayuda. Él y nosotros tenemos claro que la única manera de juntar esas firmas es que los partidos se muevan.
- ¿Es lo mejor para la candidatura?
- Es una buena decisión. Era más fácil que se inscribiera en un partido, pero creemos que esa es una primera prueba de vínculo, él va a tener que usar toda la estructura partidaria en todo Chile y va a involucrar a los partidos en esa tarea.
- ¿Cómo le afecta a Guillier el que Carolina Goic inscriba desde ahora su candidatura?
- Ahí hay dos señales: afirma que va a llegar a noviembre, despejando un montón de dudas sobre el tema para muchos de nosotros en los partidos. Y le permite algo bien complejo, con la nueva ley, como es el tema del manejo de recursos.
- ¿Es una desventaja para Guillier?
- Es una clarificación. En la medida que uno sabe que hay una candidata que llegará a noviembre, se resuelven hartas discusiones.
- ¿Cuáles?
- Como la lista parlamentaria, que el comando se hace con los partidos que están más los independientes, donde no está la DC, que no vamos a esperar a que en junio o julio resuelva bajar su candidata para meterlos en la campaña. Se estructura una realidad: somos los que somos, tenemos que hacer campaña, programa y movilizarnos.
- La semana pasada la DC volvió a invitar a sus socios a un acuerdo para lista parlamentaria común, ¿ese escenario cierra cualquier posibilidad a llegar a un acuerdo?
- La DC sabía explícitamente que con una candidatura propia a noviembre no había ninguna posibilidad de tener una lista parlamentaria única, se lo dijimos privada y públicamente; se lo dijimos a todos los senadores y diputados que querían abrir esa posibilidad; y al gobierno que intentó convencernos de que era posible. Por lo tanto, la declaración de la DC de la semana pasada no tiene mucho sentido hoy.
- ¿Mienten quienes dicen en la DC que aún hay muchas conversaciones?
- No, nadie está conversando con la DC, ni nosotros ni el PS ni el PR ni el PC. Puede haber personas que están tratando de hacer algo, senadores y diputados que han tratado de convencer que hagamos una lista parlamentaria común, pero ninguna de las directivas ni estructuras partidarias está conversando ni va a conversar con la DC, en un tema que ya fue claro.
-¿Antes hubo voluntad de hacerlo?
- Antes. Nosotros dijimos claramente, y con un debate interno muy jodido, que el PPD estaba disponible para apoyar a Carolina Goic en la primaria leal y desplegadamente, porque pensábamos que podía ser, incluso el PC estuvo disponible a no proclamar a Guillier, pero eso no ocurrió. De ahí para adelante no hay ninguna posibilidad que en el PPD haya alguien que vaya con la DC. En teoría, una lista de la DC, el PC y el PPD es la locura misma, quién entiende eso. Hicimos todo lo posible por llegar a una primaria con la DC arropada y no fue posible. La DC definió camino propio y un sentido de identidad y tiene el legítimo derecho de hacerlo, pero uno no puede explicar una mínima coherencia con dos candidatos presidenciales distintos y una lista parlamentaria.
- En la DC insisten en que la decisión que tomaron también favorece a la NM porque amplía la mirada hacia el centro, ¿comparte eso?
- Sí, creo que clarificar los contenidos y conquistar electorado que no está votando para que lo haga en una primera vuelta es un aporte de la DC. Lo podría haber hecho igual en la primaria. Pero bueno, es un aporte porque la DC no ha cambiado domicilio político, por lo tanto, entendemos que esta es una discusión de ideas, que no puede haber descalificaciones. Por eso, cuando aparece Matías Walker diciendo que esto es como la vieja UP, me parece absolutamente descalificatorio, no es el lenguaje que hemos usado.
- ¿Y hay espacio para un pacto de apoyo mutuo para la segunda vuelta?
- Es indispensable y creo que sí es posible, ellos no cambiaron de domicilio político y nosotros entendemos que la gobernanza de Chile requiere un pacto de centroizquierda. Nosotros estamos 100% convencidos de que si hay que votar por Carolina Goic, porque tiene más votos, lo vamos a hacer y no entiendo por qué ellos no podrían hacerlo si Guillier gana.
- ¿Esa declaración de voluntad debería explicitarse?
- Ojalá. No está en el debate todavía, pero sería razonable que lo hiciéramos para que se entienda que dos listas no es una competencia de unos en contra de otros, sino unos más los otros.
- ¿Cuánto amenaza el Frente Amplio y la candidatura de Beatriz Sánchez a las posibilidades del senador Guillier?
- Ellos van a ocupar el espacio político que ha ocupado el enojo, el indignado y eso está entre el 15% más menos. La ventaja que veo es que este Frente Amplio, en esta ocasión, tendrá que explicitar cuáles son sus aspiraciones país y transformar el enojo en propuesta. Hecho eso, uno en una segunda vuelta puede entrar a conversar. Es posible negociar en una segunda vuelta con la DC y con el Frente Amplio porque para ganar no basta solo la DC, ese es un proceso que se va a dar naturalmente más que en las personalidades, en los contenidos.
- ¿Y cuánto espacio hay para que se produzca esa conversación, desde el Frente Amplio hay solo críticas a los partidos tradicionales?
- Si el Frente Amplio solo tiene como objeto criticar el espacio del progresismo y no tiene propuestas, es muy difícil, pero una campaña presidencial no se va a basar en pelear con la vieja Concertación o con la NM van a tener que proponer algo, vamos a ver qué piensan.
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