Fusión por absorción. Esa es la fórmula que utilizaría Empresas Santa Carolina -ligada a la familia Larraín Peña– para sumar a su portafolio la Viña Morandé.
Para esto, Santa Carolina ofrecería un canje de acciones a los controladores de Viña Morandé, lo cual le permitiría a la familia Yarur pasar a ser accionista minoritario de la empresa resultante.
De acuerdo a fuentes que conocen este proceso, las negociaciones se encuentran en una fase avanzada y, de llegar a un acuerdo definitivo, marcaría una nueva etapa para la compañía fundada hace 22 años por el enólogo Pablo Morandé y que se encuentra en manos de sus actuales dueños desde el año 2000.
Entre los aspectos que resta por definir es si esta operación apunta exclusivamente a la Viña Morandé o bien al Grupo Belén en su conjunto, que incluye a las firmas Vistamar, Mancura, Fray León y Zorzal, ubicada en Mendoza, Argentina.
En ese país, la viña chilena tiene desde 2011 un acuerdo de comercialización exclusiva para la bodega Zorzal -perteneciente a inversionistas canadienses y la familia trasandina Michelini- que está enfocada a vinos de alta calidad en el Valle de Uco (Mendoza).
Y en este mismo valle, Santa Carolina inició en 1996 su proyecto Finca el Origen, que conformó el integrante argentino del cluster vitivinícola de este grupo: Carolina Wine Brands, el cuarto actor más importante de Chile en volumen y que integran Viña Santa Carolina, Viña Casablanca, Ochagavía y Antares.
Según quienes conocen de las tratativas, la operación incluiría todas las marcas, con lo cual el negocio rondaría -si además se consideran los campos- los US$ 40 millones a US$ 50 millones.
De concretarse la operación, personas al tanto explican que el plan de los controladores de Santa Carolina es abrir la bodega a bolsa en el mediano plazo.
Hasta ahora, solo Concha y Toro, Santa Rita, San Pedro Tarapacá y Viñedos Emiliana tiene presencia en el mercado busrátil.
Mercados y desafíos del Grupo Belén
El Grupo Belén exporta 45 países, entre los cuales destacan los mercados de Inglaterra, Japón, Rusia, Estados Unidos y Brasil, en el marco de una presencia comercial en casi todo el continente americano. Asimismo, el mercado chino ha adquirido un creciente protagonismo con un dinamismo que ha llevado a triplicar los envíos a ese destino.
Sin embargo, las exportaciones del grupo se han visto afectados por una baja en los precios promedio de sus vinos, desde valores en torno a US$ 40 la caja, hasta niveles de US$ 36,6 en los primeros meses de este año. Esto ha requerido redoblar los esfuerzos para mejorar la posición competitiva internacional en los mercados de mayor valor, lo cual ha demandado una mayor inyección de recursos de sus controladores para mejorar los números.
La amplia capacidad instalada de Santa Carolina
Viña Santa Carolina S.A. posee 1.040 hectáreas de viñedos en los principales valles vitivinícolas de Chile (746 ha. en campos propios y 294 ha. en campos arrendados) en los valles de Maipo, Casablanca, Cachapoal, Colchagua y Cauquenes. Asimismo, en Argentina tiene 229 hectáreas productivas en el Valle de Uco a través de su filial Finca el Origen.
En esta superficie plantada, destaca la compañía, "se producen uvas de las cepas más demandadas por los mercados internacionales": Cabernet Sauvignon, Merlot, Malbec, Pinot Noir, Sauvignon Blanc, Chardonnay, Syrah, Carmenere y Petit Verdot.
En el ámbito de la elaboración de vinos, Viña Santa Carolina S.A. posee cinco bodegas de vinificación que totalizan una capacidad de 41,9 millones de litros: Miraflores (7 millones de litros); Molina (18 millones de litros); Rodrigo de Araya (5,5 millones de litros); Totihue (10 millones de litros) y Casablanca (1,4 millones de litros).
La viña exporta a cerca de 75 países, y sus principales mercados son EEUU, Canadá, Latinoamérica, China, Japón y Corea, donde tiene una extensa red de distribuidores.
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