Los problemas financieros por los que está atravesando la internacional Astaldi están comenzando a tener un correlato en Chile. Esto, porque si bien se ha descartado cualquier efecto directo en las obras que están levantando, la italiana salió a explicar la situación a sus trabajadores en el país.
La empresa entró en un proceso de reorganización de deudas de carácter voluntario en Italia, a raíz del atraso que ha tenido en la venta de la concesionaria del Tercer Puente sobre el Bósforo, en Turquía, y que formaba parte de un plan de refuerzo patrimonial de la compañía que se acordó la primera mitad del año.
"La operación de refuerzo patrimonial de Astaldi, basada en el aumento de capital y en la venta de los activos en concesión, ha sufrido un fuerte retraso", comentó la misiva que fue firmada por el directivo de la sociedad, Filippo Stinellis.
De este modo, la empresa decidió traducir y difundir el comunicado a sus trabajadores en Chile, donde explica las medidas que está tomando para proteger la ejecución de sus contratos, lo que incluye crear dos nuevas sociedades para hacerse cargo de sus actividades internacionales.
"Además, con el fin de brindar seguridad adicionalmente a los clientes y empleados, subcontratistas y proveedores, Astaldi S.p.A. seguirá respondiendo solidariamente por la ejecución de todos los contratos", agregó.
En paralelo, la empresa fue objeto de una huelga por parte de contratistas del Hospital Felix Bulnes, quienes acusan deudas impagas por $ 11.000 millones.
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