El mensaje político de La Florida

Por séptima vez consecutiva en cosa de pocas semanas, el pasado viernes debió suspenderse por falta de quórum la sesión extraordinaria del Concejo Municipal de la comuna de La Florida, instancia que debe, al menos en el papel, definir quién es la persona que ocupará el puesto de alcalde que dejó vacante el renunciado Jorge Gajardo. La ausencia de los representantes de la actual oposición al gobierno impidió que operara la instancia legalmente definida para resolver este tipo de situaciones, de forma que esta importante comuna del país, que tiene una población estimada superior a los 400.000 habitantes, sigue sin un edil responsable, situación y espectáculo político que sólo se pueden definir de lamentables.



Sin ánimo de reiterar datos sabidos, vale la pena recordar que la figura del alcalde no es decorativa en el aparato administrativo de una comuna. Por ley, estos personeros cumplen una función relevante ante sus respectivos concejos en materias como la aprobación de los planes comunales, presupuestos, planos reguladores, licitaciones, adquisiciones, concesiones y permisos.

La dinámica política en este tema en la comuna de La Florida no sólo entorpece el funcionamiento de una entidad relevante para 400.000 personas, sino que también tiene consecuencias de fondo que contaminan la aproximación de los ciudadanos a la política. En efecto, el mensaje que se transmite aquí es que no importa qué instituciones se den los chilenos para resolver sus diferencias, ya que al final es posible eludirlas impulsados por motivaciones mezquinas. Siendo 2012 un año electoral a nivel municipal, queda por ver si los electores sabrán castigar situaciones como ésta.