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Conflicto en Egipto se agudiza
Los manifestantes dejaron claro que no se dejan engatuzar con las promesas de Mubarak de no volver a presentarse como candidato en las elecciones de septiembre. Quieren que comience de inmediato una nueva era sin Mubarak. Pero el régimen se defiende y contraataca utilizando a sus esbirros.
Leipziger Volkszeitung, Leipzig
La Plaza de la Libertad fue, hasta entrada la noche, escenario de violentos enfrentamientos entre dos facciones bajo la misma bandera y con reclamos diametralmente opuestos: Que se vaya Mubarak y Que se quede Mubarak. () Queda claro que la oposición nunca fue dueña de la situación. El viejo faraón dejó que se supiera que no piensa abandonar su puesto. Yo sigo siendo la estabilidad, es el mensaje que Mubarak envió a Washington.
La Stampa, Turín
Mientras Mubarak antes podía, con cierta credibilidad, presentarse como la panacea contra el caos, ahora lo provoca al seguir en el poder. No es digno de crédito que ahora quiera utilizar el tiempo que aún le queda para conducir a su país a unas elecciones limpias. Esa tarea la debe asumir otra persona.
De Volkskrant, Amsterdam
Los manifestantes dejaron claro que no se dejan engatuzar con las promesas de Mubarak de no volver a presentarse como candidato en las elecciones de septiembre. Quieren que comience de inmediato una nueva era sin Mubarak. Pero el régimen se defiende y contraataca utilizando a sus esbirros.
Leipziger Volkszeitung, Leipzig
La Plaza de la Libertad fue, hasta entrada la noche, escenario de violentos enfrentamientos entre dos facciones bajo la misma bandera y con reclamos diametralmente opuestos: Que se vaya Mubarak y Que se quede Mubarak. () Queda claro que la oposición nunca fue dueña de la situación. El viejo faraón dejó que se supiera que no piensa abandonar su puesto. Yo sigo siendo la estabilidad, es el mensaje que Mubarak envió a Washington.
La Stampa, Turín
Mientras Mubarak antes podía, con cierta credibilidad, presentarse como la panacea contra el caos, ahora lo provoca al seguir en el poder. No es digno de crédito que ahora quiera utilizar el tiempo que aún le queda para conducir a su país a unas elecciones limpias. Esa tarea la debe asumir otra persona.
De Volkskrant, Amsterdam
