Luego de tres meses de tramitación del proyecto de reforma laboral en la comisión de Trabajo de la Cámara de Diputados -donde se han escuchado a más de cincuenta expositores y ya se aprobó por estrecho margen la idea de legislar-, el gobierno ayer ingresó a la secretaría de la corporación un oficio con el que le pone el plazo de urgencia simple a la discusión de la iniciativa.
La medida implica que se da un plazo de 30 días para el total despacho del proyecto de ley desde el Congreso.
La urgencia tomó por sorpresa al diputado UDI Patricio Melero, quien ayer en la sesión de la comisión de Trabajo pidió explicaciones al gobierno sobre las razones de la disposición en pleno período de audiencias con organizaciones.
Ante la consulta, el asesor legislativo del Ministerio del Trabajo, Francisco del Río, explicó que la medida responde a un tema de formalidad, que tiene como objetivo que el debate del proyecto tenga prioridad en la tabla de la comisión, sin que eso signifique altererar el mecanismo de discusión que la instancia parlamentaria decida.
"Si los tiempos de tramitación sobrepasan los plazos reglamentarios de la urgencia, como inifinitas veces se ha hecho, la urgencia probablemente se renovará o no se renovará", dijo del Río.
En la instancia que ahora preside el diputado Lautaro Carmona (PC) también se acordó extender el plazo de presentación de indicaciones hasta el mediodía del lunes 13 de abril.
Trastienda
Desde el Ejecutivo informaron que la idea de ponerle urgencia simple al proyecto es acelerar el tranco del debate, ya que la mayoría de las posturas de los gremios, los parlamentarios y académicas ya están claras.
Asimismo, reconocen que la discusión de la reforma laboral ha empezado generar bastante ruido en el ambiente en las últimas semanas, por lo que se vio como necesario pisar el acelerador y fijar márgenes al debate.
También indican que si bien la urgencia apunta al despacho en 30 días del Congreso, el objetivo es que al menos la Cámara Baja en ese plazo haya aprobado y enviado el proyecto al Senado.
Por otro lado, una fuente de la Nueva Mayoría indicó que "hay una preocupación de los partidos del sector, en particular del PC, para que la reforma salga antes del 1 de mayo de la Cámara y así se pueda dar una señal potente para que el movimiento social vea esto como un avance y se quede conforme".
Otro informante entendido en la materia reveló que "el gobierno quiere despachar luego el proyecto de reforma laboral de la Cámara de Diputados para poder avanzar con los temas más políticos como el proyecto que regulará la relación entre política y dinero y la reforma constitucional". Añadió que "se quiere que al ingresar esos proyectos ya esté despejado el debate por la regulación laboral".
Los parlamentarios del oficialismo dicen la presentación de la urgencia era esperable, debido a que la etapa de audiencias ya está finalizando y próximamente se viene el inicio de la discusión en particular para el despacho a la comisión de Hacienda y a la sala.
Sin embargo, la decisión no cayó bien en el empresariado, justo cuando el lunes los principales gremios del sector acusaron falta de diálogo y crearon un referente para enfrentar la reforma laboral.
El vocero de ese grupo, el presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), Ricardo Mewes, dijo que la urgencia "se ve como que hay que echarle para adelante y pasar la aplanadora".
"Creo siempre hay espacio para el debate. Hay varias recomendaciones de ajustes que siguen saliendo en diversas materias como la adaptabilidad laboral, pero por la premura del tiempo probablemente no se vayan a poder incorporar y eso es preocupante", reclamó Mewes, quien agregó que "la expectativa ahora está puesta en el Senado, pero nos hubiera gustado que la discusión se hubiera hecho con más calma y fundamentos".
El secretario general de la CUT, Arturo Martínez, dijo que la medida del Ejecutivo por acelerar la discusión "no la veo como un problema siempre que las cosas se hagan bien".
Indicó que "si van a despachar un proyecto malo, no vale la pena la urgencia".
Anuncian cupos para programa de capacitación
La ministra del Trabajo y Previsión Social, Javiera Blanco, acompañó ayer a la presidenta de la República, Michelle Bachelet, en el lanzamiento del programa de capacitación +Capaz en todas las regiones del país y anunció que se decidió aumentar los cupos para los interesados en la Región de Atacama a 2.500 vacantes.
La secretaria de Estado explicó que junto con decidir postergar el inicio del programa +Capaz en dicha zona -hasta la normalización de ciudades y poblados- se resolvió que los originalmente 1.360 cupos para jóvenes y mujeres de esta zona en 2015, se aumentaran a 2.500, con énfasis en áreas como la construcción, alimentación, servicios y minería.
Blanco dijo que se reforzarán los cursos en el ámbito del emprendimiento para aquellas mujeres que decidan iniciar actividades por cuenta propia, con Sernam, Prodemu, Sernatur, Fosis e Indap, entre otros.
Además, se destinarán al menos 2 mil becas sociales, focalizadas en tareas ligadas a la construcción, autoconstrucción y reparación de viviendas. Estos cursos considerarán un apoyo para la compra de implementos y herramientas que permitan ejercer el oficio de forma inmediata y completa. Se espera ejecutar esta iniciativa a mediados de mayo 2015.
El 6 de abril se abrirán las postulaciones al Programa Más Capaz desde Arica a Magallanes, incluyendo Isla de Pascua. La información estará disponible en la web de Sence, en sus municipios, oficinas de Chile Atiende, Direcciones de Sence y seremis del Trabajo.
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