Sectores decepcionan en marzo y ponen en duda la recuperación económica

Como "decepcionantes" o derechamente "malas" calificaron los economistas locales las cifras que ayer publicó el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) sobre la marcha de los principales sectores productivos del país durante marzo.

Tanto así, que para los analistas esto se tradujo en una disminución de la expectativa de crecimiento para el citado período de este año -ahora se instaló un rango de 0,5% a 1,2% contra el en torno a 2% anterior (ver tabla)- y, como consecuencia, para el primer trimestre, se espera un 2%, es decir, apenas por encima del 1,8% observado en octubre-diciembre.

El desánimo se basó en que la producción manufacturera acusó una caída 2,8% en marzo, comparado con igual lapso de 2014, la que -según destacó Banchile Inversiones- es la mayor desde agosto último. Otro dato que preocupó fue la disminución de 4,9% que registró la producción minera, catalizado por la menor producción de cobre, mantenciones de plantas y el efecto negativo asociado al temporal en el norte del país.

Y si bien las ventas minoristas crecieron, sólo lo hicieron un pobre 0,4% en marzo versus el mismo período del ejercicio anterior.

Se atenuó la recuperación

Desde la óptica de Security, las cifras sectoriales de marzo ratifican que la economía sigue en un proceso de debilidad, con un sector privado que continúa ajustándose. Ello, más allá del efecto de los desastres naturales que hubo en el norte del país.

Sin descartar la dimensión de dichos sucesos, la Cámara de Comercio de Santiago advirtió que la magnitud de la desaceleración observada revela una pérdida de fuerza en la actividad. Esto, agregaron "en un contexto de turbulencias políticas que aportan una cuota extra de incertidumbre".

De hecho, el economista de Scotiabank Chile, Benjamín Sierra, expresó que "el crecimiento mantendrá una evolución limitada e irregular en el primer semestre y señales de reaceleración más significativas (y/o sostenidas), pero todavía moderadas, sólo se verían a partir de mediados de año".

En este marco, el economista jefe de Banco Penta, Matías Madrid, explicó que ajustaron su proyección de expansión del PIB para 2015 a 2,5%, materializándose -precisó- el peor escenario del rango publicado por el Informe de Política Monetaria (IPoM) del Banco Central.

Su inquietud se basa en que el crecimiento del primer trimestre se ha beneficiado del fuerte incremento del gasto público, "cuyo impulso no puede ser permanente sin deteriorar la posición fiscal. Por otra parte, refleja que el resto de la economía no está creciendo y no existen cifras que sugieran una recuperación en el corto plazo".

No obstante, en el caso de EuroAmerica no creen que este menor dinamismo económico amerite correcciones a la baja en las estimaciones de PIB 2015, ya que en su opinión parte importante es explicado por factores coyunturales (minería y ventas retail), lo que debiese corregirse en los meses venideros.

Lo que sí pareciera generar cada vez más consenso entre los analistas es el futuro más inmediato de la tasa de interés de política monetaria: 3% durante todo 2015.

Este cuadro asume la debilidad por el lado de la inversión, en circunstancias que han caído las importaciones de bienes de capital, cedido los permisos de edificación y el ritmo de actividad de la construcción.