Juan Carlos Guajardo: “En minería es necesario un fast track. Los problemas surgen por decisiones del Estado”

Lograr un marco regulatorio más claro para los proyectos, especialmente mineros, debe ser la prioridad del gobierno para enfrentar el momento que vive la industria, dice el director ejecutivo de Cesco, Juan Carlos Guajardo, quien a fines de diciembre dejará este cargo.

Según su análisis, la cartera de inversión por US$ 105.000 millones del sector, que avanzó rápidamente, se construyó bajo un escenario económico y social totalmente distinto al que se está dando hoy.

"La evaluación de los proyectos que se haga, será diferente y esto puede significar decisiones distintas a las que se había previsto anteriormente", dice.

Por eso, advierte que "lo importante es resolver los problemas con mirada de largo plazo. No se saca nada con hacer un traje a la medida de un proyecto, si no hay una solución integral".

De todos modos recalca que "es necesario un fast track, porque la acumulación de problemas que se ha visto, en muchos casos, tiene que ver con la irracionalidad de decisiones de parte del Estado".

Guajardo comenta que en los ocho años que ha dirigido al centro de estudios, ha visto que el país tiene una insuficiencia para anticiparse a las crisis, lo que ha terminado por mermar la competitividad.
"Las respuestas del sistema político están llegando de forma precipitada y sin el nivel de preparación ni consenso que se requeriría", dice.

Nuevo ciclo
Guajardo explica que se está terminando un ciclo minero y, el que está comenzando, será más complejo.
A nivel internacional, será difícil que se repita el desempeño de China. E internamente, el clima político y social será mucho más exigente.

Entre otros temas que han contribuido a esto, está la reforma tributaria, que a juicio de Guajardo ya está incorporada en las empresas. Pero se mantiene la incertidumbre en temas laborales.

Todo esto hace que Guajardo mire las ventas que se están anunciando de algunos activos mineros en Chile. "Hay que tomarlos como un elemento de reflexión sobre las decisiones que se están tomando en torno a la minería", dice.

"Si bien las grandes compañías están en estrategias de revisión del manejo de activos, creo que la decisión de prescindencia de algunas operaciones marginales no se habrían tomado cinco u ocho años atrás", dice.

Codelco: falta voluntad política
Otro tema que le preocupa es Codelco. Cesco participó activamente en la creación del nuevo modelo de gobierno corporativo de la estatal.

"La idea que estaba tras la reforma era permitir una acción que tuviera una concepción de Estado y de largo plazo, alejándola de la de gobierno y corto plazo. En la aplicación, en algún momento se pudo avanzar en la dirección correcta, pero hasta ahora, y en especial en el último tiempo, no se ha logrado ese objetivo", dice.
En ese sentido, dice que el gobierno corporativo no se ha consolidado, lo que debería ser una tarea país lograrlo.
Sobre qué cambios se podrían hacer, Guajardo enfatiza que lo que hay que mejorar es la "voluntad política".
Respecto del financiamiento, dice que con la capitalización se ha visto un avance, porque hay un acuerdo político de que se necesitan los recursos. "Pero no estoy seguro de que todos los sectores estén dispuestos a una política de financiamiento realmente de largo plazo en Codelco", dice.

Futuro de Cesco

En el análisis de su paso por Cesco, Juan Carlos Guajardo concluye que un centro de estudios como el que dirige "se justifica plenamente", porque ayuda a tener una visión independiente de las políticas públicas para el sector.

Uno de sus objetivos cuando llegó era darle mayor relevancia al trabajo del think tank. "En el plano de las ideas, Cesco es un interlocutor válido en el debate", dice.

También destaca el acercamiento que hubo con Asia, a través de la Asia Copper Week, ya que mejoró el relacionamiento con la zona que ha liderado el crecimiento en las últimas décadas.

Respecto a lo que le faltó hacer en Cesco, Guajardo dice que aunque el centro de estudios es un referente, aún hay una distancia con que haya un efecto más concreto en la toma de decisiones a nivel político.