Ad portas del término del año, el ánimo empresarial comienza a dejar atrás el pesimismo

Poco a poco el mundo de los negocios comienza a transitar hacia un mejor estado de ánimo. Un ejemplo de ello fue el repunte que exhibió en noviembre el Índice de Confianza Empresarial (ICE) que elabora el Centro de Estudios en Economía y Negocios (CEEN) de la U. del Desarrollo (UDD) en conjunto con Diario Financiero.

El indicador avanzó dos escalones hasta -3,9 puntos para pasar desde un leve pesimismo hasta neutral, es decir, ni bueno ni malo.

Así, luego de alcanzar un piso a fines del primer semestre (-49,9 puntos), el ICE ha mostrado una tendencia de mejora sostenida durante la segunda parte del año.

En este resultado influyó el avance de 9,4 puntos que se observó a nivel de la industria financiera. Y si bien este impulso no le alcanzó para escapar de un moderado pesimismo, en esta rama de la economía se percibió una mejor visión sobre la demanda nacional, así como resultados recientes mejores de lo esperado.

Lo anterior se condice con un aumento del ICE del rubro de 50 puntos en el último año.

Otro rubro que exhibió un aumento, aunque ya de menor cuantía, fue el comercio (3 puntos), donde se ha afianzó un leve optimismo gracias a mejores expectativas sobre resultados recientes respecto a lo que esperaba y sobre la situación económica a tres meses. Esto fue contrarrestado por un retroceso en la perspectiva sobre la situación del negocio a tres meses.

Esto último bien podría explicarse por la incertidumbre que prevalece sobre el curso de la pandemia en el país y, por lo tanto, qué tanto podría afectar la reapertuta de la actividad económica en el corto plazo.

Una consideración que se ve compensada por las proyecciones de un alza en el consumo propia de la Navidad y Año Nuevo, en especial en el marco de que se autorizó un nuevo retiro de ahorros previsionales.

Cambios más tenues

La minería, donde mejoraron las perspectivas a tres meses pero retrocedieron las relativas a la situación reciente, también se observó un avance de 2,5 puntos. Este, no obstante, no bastó para alejarlo de un tenue pesimismo.

En el mismo estado siguió instalado el ICE de la construcción pese a que una visión más favorable sobre el panorama más reciente

La confianza empresarial solo retrocedió en el sector agrícola, desde moderadamente optimista hasta neutral (-20 puntos). Si bien se verificó una perspetiva favorable sobre el escenario de la economía a tres meses, ello fue acompañado por un retroceso de sus percepciones sobre el cuadro que enfrentó su negocio en lo más reciente y esperado a tres meses.

Según el reporte del CEEN-UDD, la visión de los empresarios sobre la situación del negocio en los últimos meses, relativa a la que habían previsto mejoró “significativamente”. Esto implicó un transitar desde un peldaño de moderado pesimismo hasta uno levemente optimista.

Este hecho representa todo un hito, pues no había estado ahí desde que se mide esta percepción.

Economía aún débil pese al desconfinamiento

El repunte del ICE se dio pese a que noviembre no trajo resultados del todo favorables en lo que respecta a la producción.
De hecho, el Banco Central anunció la semana pasada que el Indicador Mensual de Actividad Económica (Imacec) acusó una caída anual de 1,2% anual en octubre (-4,8% en septiembre), a pesar del mayor desconfinamiento y la baja base de comparación.
En este escenario, que sorprendió al mercado, llamó la atención la disminución en el ámbito de los servicios y la producción de bienes, la que fue contrarrestada en parte por el crecimiento del comercio.
Lo anterior se dio pese a que la producción industrial del mismo mes aumentó 3,5% anual (+1,9% en septiembre), en lo que influyeron los segmentos manufactureros y de minería, que tuvieron un aumento anual de 6,2 y 1,9% anual (+5,3 y -0,8%, respectivamente, en septiembre). La producción de electricidad, gas y agua cedió 1,1% anual (-0,5% en septiembre).
En el mercado laboral, el desempleo del trimestre móvil agosto-octubre alcanzó a 11,6% (12,3% el trimestre móvil previo).