En medio de la tranquilidad del Parque Bustamante, ayer se desencadenó un terremoto sindical en las oficinas de la Federación de Trabajadores del Cobre, luego de una reunión de directorio que terminó por cerrar los más de 25 años de Raimundo Espinoza como presidente de la organización sindical que agrupa a los trabajadores de Codelco.

Por la mañana, en un consejo que fue programado a última hora del lunes, nueve de los 15 integrantes de la mesa decidieron reestructurar el directorio FTC, sacando de su presidencia a Espinoza, quien estaba de visita en Ventanas.

Según explicaron los nuevos líderes, la reestructuración obedece a una “crisis de gobernabilidad y conducción”, pero principalmente a la falta de representatividad que veían en el expresidente ante el directorio de la empresa, apuntando a su doble militancia en la que muchas veces habría optado por defender los intereses de la compañía por sobre la de los funcionarios.

La movida, impulsada principalmente por los dirigentes de las divisiones del norte, puso a la cabeza de la Federación a Héctor Roco, presidente del sindicato N° 1 de Chuquicamata; a Hernán Guerrero en la vicepresidencia, presidente del sindicato N°3 de Chuquicamata, y a Nelson Suárez de El Teniente, como secretario general.

La movida no era desconocida para Espinoza, que ahora quedó como consejero de la FTC, entidad que agrupa a más de 14 mil trabajadores, ya que en varias oportunidades había sido advertido por otros integrantes de la mesa de que era momento de dar un paso al costado, a lo que se había opuesto con una actitud desafiante.

El propio Espinoza había adelantado hace unos meses que este sería su último ciclo al frente de la organización, el que finalizaba en abril de 2019.

Si bien los dirigentes explican que la medida responde a una serie de diferencias con el rumbo de la organización, el hecho que terminó por inclinar la balanza para que se tomara esta medida de fuerza fue el conflicto de los sindicatos de Chuquicamata con la Corporación a inicios de marzo, cuando acusaron que Nelson Pizarro se negaba a recibirlos.

Respecto a la posición del expresidente en el directorio de Codelco, esta se encuentra garantizada hasta el término de su período, en mayo de 2020. No obstante, Guerrero advirtió que “el representante de los trabajadores debe tener ciertas competencias y que sea de verdad representativo de los trabajadores y que la opinión que se dé al interior del directorio, sea la de las trabajadores, como que la información que entrega el directorio, la tengamos todos, porque si no, no tiene ningún sentido que haya un representante de los trabajadores”.

Roco aseguró que la organización se encontraba en una situación de debilidad “que atenta para que seamos interlocutores válidos ante la administración”.

El primer gran desafío de la nueva mesa será sortear el congreso anual de la FTC, a realizarse entre el 9 y 11 de abril en La Serena, donde lo más probable es que se vote una censura liderada por el propio Espinoza.

Espinoza tendría el apoyo para esto

Disidencia buscará censurar a la nueva mesa

El rol de los directores de El Teniente será clave en el futuro de la Federación.

Si bien el ahora expresidente de la FTC, Raimundo Espinoza, asegura que la noticia lo tomó por sorpresa en medio de una reunión que sostenía con dirigentes de la División Ventanas, varias fuentes explican que estaba totalmente al tanto de la reestructuración.

De hecho, la ahora disidencia liderada por el propio Espinoza, buscaría presentar una censura a los dirigentes, para lo que necesitan concitar el apoyo del 20% de las bases, algo que ya tendría. Lo realmente complejo será el siguiente paso, cuando esta solicitud deba ser sometida a votación entre todos integrantes de las directivas de los sindicatos de Codelco, en una resolución que se definirá por mayoría simple.

Y si bien los seis directores que no participaron en la votación de ayer no se encuentran completamente alineados con Espinoza, existe incertidumbre a lo que pueda ocurrir con los representantes de El Teniente, una de las principales faenas de la corporación, que quedaron postergados en la nueva composición de la directiva.

Incluso hay una tercera salida que podría tener el conflicto. Esto, porque algunos creen que toda esta crisis podría derivar en que se termine dividiendo la Federación en las operaciones del norte y sur, respectivamente.

Llamó a recuperar el "respeto perdido"

Roco critica a Pizarro por relaciones laborales

También cuestionó como se han desarrollado los proyectos estructurales de Codelco.

Con 40 de sus 62 años al interior de Codelco, Héctor Roco no es un novato en el mundo sindical: preside el sindicato N°1 de Chuquicamata y es vicepresidente de la FTC desde 1999. Se desempeña como jefe de turno de mantención y era cercano a Raimundo Espinoza y al Partido Socialista, pero ayer fue uno de los hombres clave para derrocarlo, al apoyar con su voto a la oposición que existía en la directiva.

En un año cargado con negociaciones colectivas, Roco explica que buscarán agotar el diálogo con la empresa, pero que si no lo logran, se movilizarán. "Se nos va a respetar, porque ese respeto lo habíamos perdido, queremos reposicionar a nuestra federación", explicó.

También fue de frente contra la administración de Codelco y la calificó como "el período más malo que hemos tenido en relaciones laborales entre la administración y los trabajadores".

Roco fue crítico con los proyectos estructurales de la compañía y señaló que "no hay ningún estructural que esté funcionando, salvo Chuquicamata subterránea y con un alto costo respecto al proyecto original". Incluso apuntó a que este último no debió realizarse, por el encarecimiento que ha sufrido con los años.