Beneficios de Sony se derrumbaron 74% en el segundo trimestre

Sony logró entre abril y junio un beneficio neto de 21.200 millones de yenes (US$ 204 millones), un 74,3 % interanual menos, debido a la caída de sus ventas y al impacto de los fuertes terremotos del sudoeste de Japón, anunció hoy.

En el primer trimestre del año fiscal japonés, su resultado bruto de explotación (EBIDTA) ascendió a 57.000 millones de yenes (US$ 549 millones), un 58,9 % interanual menos, y su beneficio operativo fue de 56.200 millones de yenes (US$ 541 millones), un 42 % menos.

Los resultados de Sony empeoraron en este período debido sobre todo a la "caída significativa" de las ventas en su rama de teléfonos móviles y al impacto en otras de sus áreas de negocio de los graves terremotos que sacudieron la isla de Kyushu (sudoeste de Japón) en abril, explicó la compañía en un comunicado.

Los ingresos por ventas del gigante tecnológico nipón retrocedieron un 10,8 % interanual hasta los 1,6 billones de yenes (US$ 15.428 millones), algo que la compañía también achacó a los tipos de cambio desfavorables, y en particular a la apreciación del yen.

En el apartado de costos, la empresa anotó un deterioro del valor de su rama de semiconductores de 20.300 millones de yenes (196 millones de dólares).

Asimismo, Sony tuvo que hacer frente a distintos gastos derivados de los seísmos de Kyushu, como la reparación de plantas de montaje y de inventarios, que ascendieron en total a unos 28.500 millones de yenes (US$ 275 millones).

Estos factores negativos fueron compensados en parte por el incremento de las ventas en su negocio de videojuegos, impulsadas por la comercialización de nuevos títulos para la videoconsola doméstica PlayStation 4.

A partir de estos resultados, la empresa ha dejado sin cambios su previsión de beneficio neto para el ejercicio en curso, que ascendería a 80.000 millones de yenes (US$ 771 millones), lo que supone prácticamente la mitad del registrado el año precedente.

No obstante, Sony rebajó la estimación de sus ingresos por ventas para este año hasta los 7,4 billones de yenes (US$ 71.639 millones), un 8,7 % menos que su anterior cálculo.