Trump: "España es un gran país y debería permanecer unido"

Mariano Rajoy se ha convertido en el sexto gobernante que Donald Trump recibió en su residencia oficial. Aunque las relaciones entre ambos países trascienden mucho más del conflicto abierto por Cataluña, la fecha elegida para la primera cumbre entre ambos dirigentes, a cinco días de la convocatoria del referéndum, ha colocado el conflicto soberanista en el foco de atención.

Hubo que esperar hasta la rueda de prensa en el Rose Garden, después de la reunión mantenida entre los gobernantes en el Despacho Oval y del almuerzo de trabajo con las respectivas delegaciones, para que saliera, finalmente, el conflicto catalán, que ha obligado a Rajoy a cancelar su previsto encuentro en la cumbre de europea de Tallín el próximo viernes.

Preguntado por las tensiones soberanistas, Trump evitó enviar un apoyo expreso a la postura del gobierno español, aunque consideró que es una "tontería" querer salir de un país como España, "con muchos siglos de historia". Subrayando que sus comentarios eran personales, como presidente de Estados Unidos, insistió en que "España es un gran país y debería permanecer unido".

Previamente, el pasado domingo, la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, aseguró que el secretario de Defensa, James Mattis, le había mostrado durante un encuentro que ambos mantuvieron en Washington su total apoyo a la postura del gobierno de España en la defensa del Estado de Derecho.

La política antiterrorista, las relaciones comerciales y conflictos internacionales como el de Corea del Norte y Venezuela marcaron el resto de los temas de la cumbre.