Cartas

Inclusión socio-laboral y seguimiento clínico

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Señora Directora:

A un año de la entrada en vigencia de la Ley de Inclusión Laboral, constatamos que, de un total de 83.813 trabajadores encuestados, hasta un 8% desconocen tener una enfermedad acreditable como discapacidad o decide no informarla. El temor a la estigmatización, inestabilidad laboral y al alza en sus costos de salud y seguros, son las razones más recurrentes para evitar informarlas.

Desde la puesta en marcha de la ley se contrataron 12.360 personas, con la participación de 1.988 empresas. Sin embargo, esto no tiene sentido si sólo se traduce en cuotas de adherencia. No hay inclusión socio-laboral efectiva sin seguimiento clínico, dado que las patologías validables requieren acompañamiento responsable, compartido en el tiempo y compromiso del empleador.

La mayoría de las empresas son inclusivas, aunque muchas no lo saben. En la práctica superan la cuota exigida por la ley, pero preocupa que desconozcan la situación real de sus trabajadores. Es indispensable construir cultura inclusiva y transparentar realidades, protegiendo al trabajador y procurando su autocuidado.

Rodrigo Arias
Presidente directorio Grupo OpenCluster

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