Editorial

Agenda de mínimos comunes: ¿focos apropiados?

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l camino de desarrollo de una sociedad necesariamente se debe fundar en la búsqueda de acuerdos en el campo político, que intenten conciliar miradas que siempre serán diversas. Qué duda cabe que estamos viviendo en Chile un contexto político muy tenso y complejo, donde por eso mismo los acercamientos Gobierno-oposición no pueden ser mirados a priori en forma negativa.

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Lamentablemente, parte de la oposición parece rechazar las conversaciones de la presidenta del Senado con el Ejecutivo, tal vez entendiendo que ellos se benefician cuando sale dañado el Gobierno. No sólo esa concepción está probando ser errónea de acuerdo con lo que muestran las encuestas, sino que definitivamente daña al país.

La situación económica que se proyecta es difícil y desafiante, más aun cuando la pandemia afecta en mayor grado a los grupos más vulnerables, de menor escolaridad y mayor precariedad laboral. Superar esas dificultades sólo será posible si el país recupera su potencial de crecimiento y de creación de puestos de trabajo formales.

En ese sentido, una agenda realista de “mínimos comunes” que debería concitar acuerdo es la promoción del proceso de vacunación, para recuperar normalidad en la actividad económica, junto con destinar los cada vez más escasos recursos fiscales a planes de inversión pública y promoción de inversión privada. Esto, con programas de reinserción y capacitación laboral para los cientos de miles de trabajadores que han salido del mercado laboral. Nada de esto, sin embargo, tiene fuerza en la agenda que se está discutiendo.

Por el contrario, surge la inquietud de que la oposición está buscando, a través de los mecanismos transitorios para enfrentar la emergencia, “correr el cerco” hacia propuestas de política pública cuestionables desde el punto de vista del desarrollo futuro, como las demandas de una renta básica universal y una agenda tributaria con claros visos anti-inversión. Es clave que en las próximas decisiones legislativas no prime el cortoplacismo que ha marcado el último año.

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