Discusión sobre el salario mínimo

Nunca ha sido fácil una tramitación para reajustar el salario mínimo. Es tradicional que la propuesta oficial no sea del agrado de los trabajadores, que los dirigentes empresariales aboguen para que el incremento no sea tan alto y que la oposición critique que el alza propuesta es insuficiente. Hasta allí todo normal.



Sin embargo, cuando parte de los esfuerzos de un gobierno deben dirigirse a alinear las filas del oficialismo, la tarea se hace aún más dura. De ahí que la administración de Sebastián Piñera debió echar mano a su mejor artillería para calmar las señales de rebeldía que se dieron entre sus correligionarios y que amenazaban con complicar todavía más un trámite que se anticipaba complicado.

Pero la tarea aún no termina. Tras el nuevo rechazo de la Cámara de Diputados a la propuesta de reajustar el salario mínimo en 6% hasta $ 193 mil, el gobierno deberá enfrentar la próxima semana otro escenario de conflicto en el Senado. Y esto, porque la Concertación está a la espera de una nueva propuesta, pero mejor al 6% señalado.

Pero más allá de los espisodios complicados que se den en el Congreso, lo más relevante de todo es que lo que se acuerde sea lo más conveniente para todo el país, especialmente considerando los efectos que Chile está comenzando a sentir debido a un contexto internacional económicamente más adverso.

Al mismo tiempo, es importante que los parlamentarios tengan claro la diversidad de empresas que existe en nuestro mercado, especialmente las de tamaño medio y las pequeñas, que son las principales generadoras de empleo en el país. Para ellas, este tema es de vital relevancia.