Por A. Chávez / B. Gutiérrez
Aún cuando la UDI se ha esforzado en aclarar que la renuncia de Rodrigo Álvarez al Ministerio de Energía no significará un nuevo conflicto entre la tienda y el gobierno, a juicio de un grupo de destacados dirigentes de la Concertación, el episodio no puede pasar desapercibido. Ello, advierten, porque junto con evidenciar la falta de coordinación y sentido de equipo que existe en el Ejecutivo, también muestra en pleno, el poder de los “duros” del gremialismo y abre una etapa de incertidumbre respecto al rol que seguirá jugando una de las las dos tiendas oficialistas.
Lo anterior es clave, toda vez que este caso también marca lo que se ha denominado el “segundo tiempo” del gobierno y en vísperas del inicio de discusiones de proyectos de ley “emblemáticos”, como serán la reforma tributaria -rechazada por figuras de peso en la UDI- la ley antidiscriminación y las eventuales reformas políticas.
En ese escenario, el ex ministro de los gobiernos de Ricardo Lagos y Michelle Bachelet, Sergio Bitar, plantea que la salida de Álvarez de cierta forma, ratificaría lo que ya se ha advertido: que el mandatario se estaría transformando en una suerte de “rehén” de la tienda de calle Suecia.
“Hay una gran debilidad de la Coalición que ha quedado en evidencia. Los chilenos hoy tendrán que valorar que la UDI se transforma en el principal bloqueo de la gobernabilidad de Chile y con su posición dogmática y una constitución rígida hace que prácticamente ni el propio gobierno de Piñera esté en condiciones de hacer los cambios que Chile necesita”, advierte el otrora secretario de Estado.
A la caza de Hinzpeter
Para quien fuera un asesor clave de la ex presidenta Bachelet, hoy analista político, Francisco Javier Díaz, el tema de la renuncia del ex titular de Energía “no hay que dramatizarlo en exceso”, dice, pero también admite que no es descartable que ahora la UDI le pase la cuenta al ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, toda vez que fue él quien lideró el reinicio de las negociaciones con los dirigentes del Movimiento de Aysén.
“Es evidente que no es un episodio grato”, dice, y agrega “sí creo que genera una nota de incertidumbre, respecto a qué tan fuerte puede ir la UDI en contra del nucleo estratégico del gobierno, centralizado en el ministro del Interior. Hay un daño en la confianza muy central y esa es la duda a despejar. No descarto que la UDI quiera ir tras Hinzpeter”, afirma Díaz.
El analista advierte que hubo ministros UDI involucrados en este episodio fallido “Larroulet, Lavín, Chadwick, estuvieron en todo momento enterados y participando de las reuniones, entonces uno no sabe cuánta lágrima de cocodrilo hay detrás del llanto por Rodrigo Álvarez”.
Ineficiencia en Energía
Desde una perspectiva más técnica Bitar recalca que este episodio también demuestra “un alto nivel de ineficiencia en una área tan crítica para el desarrollo del país, como es el sector energético”.
En tanto, el presidente de la DC, senador Ignacio Walker, dice que al gobierno le “falta un cierto oficio político. Tener un quinto ministro de Energía en un poco más de dos años es una cuestión complicada”.
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