Hacienda: déficit estructural alcanzó a 0,7 puntos del PIB en 2013

El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, anunció esta mañana que el déficit estructural alcanzó en 2013 un 0,7 puntos del Producto Interno Bruto (PIB).

Según el jefe de la billetera fiscal, de acuerdo al último balance que entrega esta administración, las causas de esta reducción se deben al mejor desempeño de los ingresos no cobre y la moderación del gasto fiscal.

Larraín enfatizó que cuando asumió el gobierno de Sebastián Piñera recibieron un balance fiscal estructural de -3,1. "Nosotros recibimos 3,1 puntos del PIB de déficit estructural. Estamos entregando 0,7 puntos del PIB de déficit estructural", agregó.

En ese sentido, el titular de Hacienda indicó que durante su gestión mejoró la posición fiscal en 2,4% del producto, equivalente a casi US$ 7 mil millones anuales de esfuerzo fiscal.

"Todo gobierno se hace cargo de las condiciones en que recibe el país y las condiciones en que entrega el país", destacó el economista y recordó que su compromiso fue reducir a 1 punto del PIB. "Se redujo más allá del 1 que era nuestro compromiso", agregó.

Junto a ello, el titular de Hacienda mencionó que para el próximo gobierno quedarán unos US$ 600 millones en el presupuesto fiscal, de los cuales unos US$ 380 millones serán de libre disponibilidad y otros US$ 220 millones de facultad explícita de asignación extraordinaria.

Fed y depreciación del peso

Respecto a lo que está ocurriendo en Estados Unidos sobre la reducción en la compra de bonos, Larraín señaló que esta es situación era "previsible y no es una sorpresa", puesto que los mercados no pueden revelar un desconocimiento respecto de que esta inyección de US $85 mil millones en compra de bonos mensuales se iba a reducir.

Frente a este escenario, la autoridad agregó que "Chile está bien preparado" y que los efectos que hemos visto hasta el momento están en el "rango de lo razonable".

En ese sentido, el jefe de las finanzas públicas explicó que la situación en EEUU ha puesto presión sobre los tipos de cambio. "Eso genera una depreciación en las monedas", explicó.

Bajo esa premisa, Larraín aclaró que se encuentra "cómodo" con la depreciación que ha sufrido el peso chileno porque generaba problemas de competitividad en sectores importantes para el país.

"El sector agrícola y el sector manufacturero estaba sufriendo los efectos", sentenció.