Medianas mineras frenan cinco años de caída y prevén envíos por US$ 1.600 millones

La mediana minería está cortando una racha negativa que ya se arrastraba por casi cinco años a raíz de la mejora que ha tenido el precio del cobre y las perspectivas que hay para el metal rojo al menos durante este año.

Según dio a conocer la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco) en su estudio de Monitoreo de la mediana minería chilena, en 2017 las exportaciones de este sector de la industria estarían por sobre los US$ 1.500 millones, mostrando una recuperación a lo visto en los últimos años, mientras que para 2018, la proyección de la entidad estatal es aún mejor, y se estima que los envíos de la industria superen los US$ 1.600 millones, principalmente a partir de que la estimación de precio promedio del cobre es de US$ 3,06 la libra.

De esta manera, se produciría un cambio en la tendencia, ya que en 2016 las exportaciones de este segmento cayeron desde los US$ 1.321 millones vistos en 2015, a unos US$ 1.200 millones, por efectos de la significativa caída en el precio del metal rojo y de una menor producción.

La mediana minería ya acumula cinco años a la baja y una caída de la producción de 36,5%, tras cerrar 2016 con 194 mil toneladas de cobre, algo que se atribuye a una consecuencia del poco atractivo que brindó el precio del metal rojo. Aunque aún no se tienen las cifras finales de 2017, se espera un alza.

A la fecha, explican desde Cochilco, el sector está compuesto por 21 compañías que explotan cobre y otras seis de oro, y son descritas como “empresas con alto nivel de desarrollo y de inversión”. Sin embargo, en el informe se advierte que existe un subgrupo de estas firmas que se encuentra más rezagadas y, por tanto, son más vulnerables a los ciclos de precios bajos, por lo que requieren de políticas públicas focalizadas.

La característica principal de este tipo de faenas es que se encuentran ubicadas en sectores de la cordillera de la Costa y en la depresión central de la zona norte y central de Chile, lo que permite que estén en las cercanías de las localidades, existiendo mayor relación con las comunidades. La zona por excelencia es la Región de Atacama, que en 2016 concentró un 58% de la producción nacional, con 112 mil toneladas de cobre, seguida por las regiones de Valparaíso, O’Higgins y Coquimbo.

Asimismo, existe un importante encadenamiento productivo, ya que el 56% del empleo directo de estas compañías corresponde a trabajadores de la misma comuna donde opera la empresa, mientras que un 30% adicional corresponde a trabajadores de la Región. En materia de proveedores locales también existe un importante impacto positivo por la compra de bienes y servicios.

En cuanto al futuro, Cochilco mantiene una cartera de cuatro proyectos entre 2017-2026, que alcanza unos US$ 2.041 millones, los que con un precio del cobre más alto tienen mejores perspectivas de desarrollo. En esta lista se encuentra la iniciativa Diego de Almagro, de Minera Sierra Norte; Productora, de Minera El Aguila; El Espino, de Pucobre, y Playa Verde, de Copper Bay.

"Este sector debe tener más acceso a créditos"

Sergio Hernández, vicepresidente ejecutivo de Cochilco, analiza el desarrollo del sector, donde dice que resolver los problemas de financiamiento es clave.

- ¿Más allá del precio, qué se necesita para impulsarnuevos proyectos?

- Los permisos y requerimientos ambientales son variables relevantes, estas empresas por su tamaño no tienen grandes estructuras en forma permanente para enfrentar periodos extensos de estudios, permisos y de requerimientos regulatorios con el objeto de llevar a cabo sus proyectos de inversión. Otra variable es que estas empresas han sido renuentes a levantar recursos de inversionistas externos, a través de la bolsa de comercio o con fondos de inversión, lo que permitiría realizar proyectos que las propias empresas por su capacidad financiera no han podido realizar.

- ¿Qué rol juega Cochilco en el desarrollo de la mediana minería?

-Hemos trabajado en el desarrollo de un mayor conocimiento respecto a la realidad de estas empresas para proponer políticas públicas focalizadas, además, de trabajar en la identificación de brechas y limitaciones. Recientemente concluimos un estudio para mejorar el conocimiento de la banca nacional en la evaluación de créditos a la mediana minería, en base a generarles mayor confianza en el análisis de los flujos de caja de estas empresas; pretendemos que este sector tenga mayor acceso a créditos.

"Muchas empresas quedaron con una situación financiera complicada"

En la vicepresidencia de Sonami, José Miguel Ibáñez, advierte que la recuperación del sector no será inmediata por los compromisos financieros que mantienen parte de las empresas del sector. Ibáñez es también gerente general de Haldeman, dueña de Michilla, proyecto icónico de la mediana minería que desde Cochilco califican como "un ejemplo de cómo una empresa mediana chilena ha hecho una inversión significativa para ocupar un espacio relevante en la minería nacional".

- ¿Cuál es la principal diferencia de la mediana, con la gran minería?

- Por lo general, la mediana minería está ubicada en sectores poblados y por lo tanto tiene una mejor relación con la comunidad, no requieren campamento, y gran parte de sus trabajadores vive en las comunidades, lo que significa que hay un aporte a la economía local que es bien valorado.

- ¿Con los precios, se verá una recuperación?

- A pesar de la mejoría de los precios, la situación sigue siendo delicada para el sector, porque muchas empresas quedaron con una situación financiera complicada luego del ciclo de precios bajos. En el corto plazo la producción se mantendrá similar, y luego podrían subir, en medida que los brownfield entren en producción. No habrá efecto inmediato porque en muchos casos se va a requerir dinero, permisos ambientales, y se tendrán que reconstituir los equipos de exploración.

-¿Cuáles son los desafíos?

- Los proyectos de la gran minería casi todos están hechos y los que quedan son de leyes no muy atractivas dentro de lo que se conoce, ahí hay un segmento que puede aprovechar la mediana minería, porque tiene acceso a yacimientos más pequeños de menos intensidad de capital y de mejores leyes, el desafío está en ser más rentables y eficientes.