Empresas chilenas podrán reclutar a trabajadores con inteligencia artificial

La transformación digital comenzó a tomarse las áreas de Recursos Humanos (RRHH) de los países desarrollados hace algunos años, quienes comprendieron rápidamente que la gestión de personas en las empresas debía enfrentarse de una forma diferente.

Con el fin de hacerse cargo de estos cambios y sumar a Chile a las tendencias internacionales, el ingeniero civil de la Universidad Católica, Jaime Arrieta, junto a Santiago Lira y Felipe Sateler, crearon BUK en 2017, una plataforma tecnológica de RRHH que opera en tres niveles: automatización de procesos de gestión, -remuneraciones, vacaciones, contratos y finiquitos-; gestión y retención de talentos; y análisis de datos como soporte en la toma de decisiones.

Jaime Arrieta, CEO de BUK, comenta que la idea surgió tras pasar por el área de RRHH de una empresa de manufactura donde, prácticamente, vivía rodeado de papeles. Luego, como parte de un programa de MBA en Estados Unidos, la idea se transformó en proyecto, luego de ver cómo las nuevas prácticas y la tecnología habían cambiado la forma de abordar la gestión de los trabajadores.

“En EEUU todos los procesos de gestión de recursos humanos están automatizados, y las personas que trabajan en esos departamentos están enfocadas en potenciar el talento y motivar a los trabajadores en función de sus ambiciones y en mejorar el clima laboral”, afirma Arrieta.

El emprendedor señala que, acorde con las tendencias internacionales, están incursionando en nuevos desarrollos propios que incorporarán inteligencia artificial y que completarán la oferta de la plataforma.

En marzo de 2019 lanzarán una herramienta con IA que permitirá estimar la probabilidad de que una persona abandone la empresa, y en junio lanzarán un módulo inteligente para procesos de selección y reclutamiento de personal, para hacer una elección eficiente de los candidatos para un puesto de trabajo.

Internacionalización

Arrienta dice que el crecimiento de la firma ha sido exponencial. Partieron con dos clientes y en dos años llegaron a 400 empresas, lo que se vio reflejado en la facturación que creció 14 veces en 2018 respecto de 2017, y las proyecciones indican que seguirán al alza a ritmos de 20% anual. Este rápido crecimiento los llevó a poner los ojos fuera de las fronteras chilenas. Ya iniciaron conversaciones con firmas en Colombia y en Perú, mercados a los que planean llegar a fines de 2019.